POR: LA COMADRE
Los demonios andan sueltos, es demasiado lo que está en juego en las elecciones de este domingo 5 de junio. Por su parte, Adán Augusto López, el Secretario de Gobernación, descartó “focos rojos” por la intervención del crimen organizado en las elecciones. ¿Qué podemos esperar de los previsibles resultados de las elecciones estatales?
A pesar de que algunas de las encuestas muestran sólida ventaja para Morena en algunos estados, no se olvide que todo proceso electoral marcha entre enigmas. No termina por quedar del todo claro si los ciudadanos encuestados están planteando lo que realmente van a hacer el domingo. Va quedando claro que en algunos estados no pareciera que haya duda de lo que puede pasar.
Sin lugar a dudas, los candidatos y partidos opositores no han logrado construir una narrativa convincente para los electores y en la mayor parte de los casos tampoco han podido contar con candidatos que les permitan tener el arrastre suficiente para atraer a los ciudadanos.
Morena tiene una amplia ventaja en 4 de los 6 estados en disputa. La alianza “Va por México” la tiene solo en un estado. Y en Durango, nos dicen que es difícil que le alcance a la candidata de Morena, será un final muy, muy peleado que puede acabar en el voto por voto, casilla por casilla. Cualquier cosa puede ocurrir con los dos candidatos que van en un virtual empate técnico.
Si la oposición no asimila las lecciones, probablemente pueda dar por perdida la elección de 2024, independientemente, de quiénes sean los candidatos. Otra lección es que, si bien una alianza opositora no es garantía de triunfo, el contender con Morena con una oposición fraccionada sí es garantía de la derrota.
En caso de que la oposición gane Durango, las 2 entidades que habría ganado corresponderían a estados en los que hubo alianza. En contraste, los resultados de las entidades donde los opositores fueron separados, Quintana Roo y Oaxaca, se prevén abrumadoramente favorables a Morena.
No es casualidad que la campaña en contra de “Alito” Moreno, por cierto, nada difícil de orquestar, quizá no tenga como objetivo principal al dirigente nacional del PRI, aunque a algunos no les desagradaría tener su cabeza. Sí tenga como fin, que este proceso sirva para minar las posibilidades de la alianza en el 2024.
La crisis de credibilidad de “Alito” Moreno es tan profunda, que en sus aspiraciones sigue hundiéndose solo, ahora, se echó encima a su nuevo enemigo, Manuel Velasco, su casi “hermano” –como dice el propio priista– se desmarcó de los audios filtrados por el dirigente del PRI, y usados para desviar la atención de los audios que, Layda Sansores, la gobernadora de Campeche, ha dado a conocer, en los que exhiben la vieja y oscura cultura del priista y sus posibles actos de corrupción.
Su nerviosismo es notable, ¿autofiltrar audios de una conversación propia para victimizarse? ¿quién lo asesora, Rubén Moreira?, meterán las manos al fuego por él, Jesús Zambrano y Marko Cortés, este último, sienten que la alianza “Va por México” se tambalea después de la publicación del audio que se expone “Alito” Moreno.
Pero más allá de lo que se echará Morena a la bolsa, el gran perdedor de este proceso electoral será –sin duda– el propio PRI, que se encamina a dejar de gobernar Oaxaca e Hidalgo, 2 de los últimos reductos del otrora partidazo.
Luego, de tres años y medio de haber perdido la Presidencia de la República, el PRI de “Alito” Moreno dejaría de gobernar 10 estados: 8 en los comicios del 2021, y 2 más en este 2022, convirtiéndose en el dirigente priista con más derrotas acumuladas.
Si les va bien, para el próximo año los priistas sólo tendrían las gubernaturas del Estado de México y Coahuila, estos dos últimos con elecciones en 2023. De hecho, Durango es el único estado en el que tendrán posibilidades de ganar este domingo, pero no será gracias “Alito” Moreno. Se sabe que Esteban Villegas, fue designado por corrientes opuestas al dirigente priista, identificadas con Manlio Fabio Beltrones e Israel Hernández Deras.
Morena, el partido del presidente López Obrador, tendría bajo su control 22 entidades y gobernaría 73 millones de mexicanos, es decir, el 58% de la población, Morena ha logrado obtener el respaldo ciudadano para ganar la mayor parte de las entidades de la República, convirtiéndose, en la primera fuerza política de México.
Como segunda fuerza por número de gobernados a nivel estatal, estaría el PRI con 20 millones, gracias, a que quedan el Estado de México, con 17 millones, y Coahuila, con 3 millones, que representan el 16% de la población de los estados.
Otro derrotado será el PAN, que tendría el número más bajo de gobernaturas desde 1997. Sólo gobernará 5 estados de tamaño mediano a nivel estatal, únicamente, gobernará el 13% de la población del país, posicionándose, como tercera fuerza.
Movimiento Ciudadano se consolida en 4 lugar, al gobernar 2 estados estratégicos como Jalisco y Nuevo León, que representan el 11% de la población mexicana.
Frente a estos resultados se prevé los siguientes escenarios de riesgo político–electorales:
Morena ganará la presidencia en 2024. Su candidata o el candidato a la presidencia mantiene clara ventaja en preferencias electorales y puede afianzar su delantera gracias a la operación de los gobernadores de su partido.
El PRI a punto desaparecer. El Partido Revolución Institucional ha ido perdiendo terreno a nivel nacional, luego de que fuera el partido hegemónico del siglo XX. El presidente de la República ha logrado cooptar y debilitar los liderazgos de este partido. La estocada fulminante sería que Morena arrebaté sus 2 últimos bastiones: el Estado de México y Coahuila. El PRI sólo podrá sobrevivir con fuertes liderazgos en el Congreso.
Relevos en dirigencias. Los liderazgos de Marko Cortés en el PAN, y de “Alito” Moreno en el PRI, se encuentran en lo más profundo, por lo que por decencia propia estarían presionados a iniciar transiciones internas. Se rumora que el gobernador Miguel Riquelme, llevaría mano para la dirigencia nacional del PRI. Y aunque Mario Delgado será el líder partidista ganador, también, suenan fuertes rumores de que dejaría la presidencia de Morena para dar paso a la organización de la elección de 2024.
Reformas estructurales. La fuerza de los partidos de oposición se concentra en impedir que no pasen más reformas estructurales, como la político–electoral. La única excepción podría ser la reforma a la Guardia Nacional que puede consolidar la formación de la primera institución de Seguridad Pública con verdadera presencia nacional. Las instituciones del Estado muestran fortaleza, por lo que el nivel de afectación a la seguridad nacional y las empresas se mantendrán en el horizonte de riesgo medio–bajo.
El INE y los organismos estatales electorales, están listos para recibir a los ciudadanos en las votaciones. Hay más de 11 millones 700 mil personas en las listas nominales, que tendrán a su disposición 21,000 casillas.
Es importante decir que los ciudadanos volvieron a aceptar la convocatoria para fungir como funcionarios de casilla. Lo hacen porque confían en el proceso democrático que los tiene a ellos, a los ciudadanos, como protagonistas. Dando buenos resultados el INE resistirá el embate.
El pasado fin de semana, sesiono el Consejo Político Municipal del PRI, para elegir el método de selección y dar paso a la renovación de la dirigencia municipal. En un primer escenario, estaba previsto que la nueva dirigencia fuera para el diputado federal, Shamir Fernández Hernández. Sin embargo, un traspié por parte del alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda, fue motivo suficiente para que se declinara a favor de la senadora, Verónica Martínez García, quien con una amplia trayectoria en el servicio público y en el trabajo del partido, será quien suceda a Lalo Olmos en la dirigencia del PRI Torreón. Hasta aquí, todo estaba bien.
Al día siguiente, la diputada local Lizbeth Ogazón Nava, estremeció las redes sociales con la publicación de que el “dirigente cenopista”, el Profesor Mario Cepeda Ramírez, se incorpora al proyecto de Morena en Coahuila, escribió: “Desde Torreón con mi compañero Diputado Mario Cepeda. Vamos a caminar juntos a la transformación de Coahuila”. El anuncio se hace luego del encuentro que sostuvieron Mario Cepeda Ramírez y el aspirante de Morena a la gubernatura de Coahuila, Ricardo Mejia Berdeja.
Ya lo habíamos anticipado en este espacio, Mario Cepeda Ramírez y toda su familia, más tarde que temprano iban a traicionar el proyecto de Manolo Jiménez Salinas, así como traicionaron al “Burbujo Mayor”, Raúl Sifuentes Guerrero, cuando se sumaron a la campaña de Humberto Moreira Valdés.
Como es del dominio público, la diputada Lizbeth Ogazón, es esposa del polémico abogado Ariel Jesús Maldonado Leza, actual regidor en Ramos Arizpe, y amigo –desde la infancia– del ex gobernador de Coahuila, el Profesor Humberto Moreira Valdés.
Ariel Maldonado, quien enfrentó cargos por el secuestro del empresario Carlos Pilgram Santos, llevado a cabo en 1997, cuando se desempeñaba como agente de la Coordinación Interinstitucional de la Dirección General de Investigaciones de Secuestros de la PGR, acto por el que cobró 600 mil pesos de rescate a la familia del empresario.
En 1998, familiares de la víctima lo reconocieron como el secuestrador, fue aprehendido en el mismo año y condenado a 19 años de prisión. El caso llegó al juez José Guadalupe Luna Altamirano, quien declaró que no existían suficientes elementos para procesar a Maldonado Leza y lo dejó en libertad.
Dispuesto a seguir con su vida, Ariel Maldonado, huyó a España tras ser liberado. Pero a mediados de 1999 el juez Rubén Arturo Sánchez Valencia ordenó su reaprehensión, por lo que se solicitó el apoyo de la Interpol para su detención, siendo extraditado desde España en 2005, y en su llegada a México se le condenó a cumplir los 19 años de prisión a los que fue sentenciado.
El hoy regidor morenista en Ramos Arizpe, solamente cumplió 3 años de su condena pues fue liberado en 2008 por supuestas dudas sobre su participación en el secuestro de Carlos Pilgram, gracias a una sentencia contradictoria pues en el documento se le acreditaron a Maldonado Leza los delitos, pero quedó absuelto de ellos y se ordenó su inmediata libertad.
Luego de una queja interpuesta por el padre de Carlos Pilgram, el juez Luna Altamirano fue investigado y se le separó del cargo. Cabe señalar, que el polémico juez encargado del caso fue también quien liberó a uno de los hijos del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, al señalar que no existía relación entre el acusado y el Cártel de Sinaloa. (Fuente: agendaviral.mx)
Si bien es cierto, no ha presentado de manera formal su renuncia al instituto político, pero su inminente salida del PRI es la más evidente muestra de la fractura que existe al interior, pues representa el segundo golpe bajo –en menos de dos meses– que recibe el “círculo de confianza” del gobernador Miguel Riquelme, el primero fue la renuncia de Jorge Luis Morán Delgado a la Unidad de Inteligencia Financiera.
En otras ocasiones lo hemos comentado, Mario Cepeda Ramírez y su familia, han sido los más beneficiados por los últimos gobiernos de Coahuila, dicen que en política no hay casualidades y para muestra basta un botón: las residencias, terrenos, ranchos, vehículos de lujo, joyas, más de 100 concesiones de taxi, cargos y puestos públicos que ostenta él, sus hijos, yernos, nueras, sobrinos, colaboradores, la lista es larga.
Al Profe Mario Cepeda Ramírez, lo persigue un oscuro pasado manchado de cárcel y corrupción. ¿Qué vio Mario Cepeda en el futuro de donde estaba para haber tomado esa decisión?
Otro rumor, es que quien ya se ve como diputado federal es el matamorense Teodoro Arguijo, suplente de Shamir Fernández, quien a la vez tiene licencia como diputado local y su suplente es precisamente Mario Cepeda.
La alta dirigencia priista de Coahuila podría llamar a Shamir Fernández a que ocupe su curul en el Congreso Local para que Mario Cepeda se vaya a su casa. Curiosamente el Profe Mario Cepeda asegura que nunca le dieron nada en el PRI, dijo, “el PRI les han dado a mis hijos, a mí no, creen que con eso estoy pagado”. ¿Es en serio?
No cabe duda de que, en el PRI, los apellidos “Cepeda” y “Villarreal” son un presagio de traición, que todo puede acabar mal, ¡Pobre de Mi Querido Torreón!
Se tiene la impresión de que existen muchos traidores alrededor del gobernador Miguel Riquelme, empezando por los priistas que se han ido saliendo a pesar de tener “sentido de pertenencia”, ¿qué se puede esperar de los que tienen origen en el PAN y se metieron al gobierno del estado?
Por cierto, la Fiscalía General del Estado detuvo a Juan Pablo ´N´ el ex director de CEAS Rural, por peculado y malversación de fondos, gente muy, pero muy cercana de Mario Cepeda Ramírez y su familia, para que vean que en Coahuila la ley sí se aplica. Sino pregúntenle a Cristian Chairez Bravo, el sobrino del “cepedista” Omar Bravo Galarza, que lo metieron 6 meses por andarse haciendo el gracioso.
Juan Pablo ´N´, fue pareja sentimental de Silvia Garza, ex esposa del ganadero Sergio Galindo, sobrina política del Profe Mario Cepeda, y actual “compañera” de Fernando López Pérez, el asesor “estrella” del alcalde de Parras, Fernando Orozco Lara.
Fernando López y Silvia Garza, han hecho una fortuna a la sombra del Profe Mario Cepeda y Rigo Fuentes, quienes ostentan propiedades valuadas en millonarios de pesos en los mejores fraccionamientos de Torreón y Parras de la Fuente.
Otros casos similares, son Chuy Villalobos Amezcua y Fernando Villarreal Cuellar, quienes se hicieron millonarios a costillas del Profe Mario Cepeda. Sin olvidar al magistrado Pepe Máynez, que se ha vuelto millonario y sin despeinarse.
Quien conozca al gobernador Miguel Riquelme, deberá pensarse más de una vez si en verdad se quiere salir del PRI. El mensaje desde Palacio Rosa es claro, ¡para los amigos justicia y gracia, y para los enemigos la ley a secas!
En chismepasillo, nos comentan que el “zopilote de las obras”, Alejandro Montes Núñez, más conocido entre los “fifís” como “Alito Mientes” y para mayor referencia es primo político de Francisco Tobías, quien fuera secretario particular de Humberto Moreira Valdés, y recién nombrado director del Instituto Tecnológico Superior de Muzquiz. Anda que no encuentra por donde embonarse para pegarse a la “ubre” del siguiente sexenio. Lo mismo lo ven entrevistándose con los equipos de Manolo Jiménez Salinas, que de Ricardo Mejia Berdeja, hasta por no dejar, anda visitando a Luis Fernando Salazar, por aquello, que se le haga ser candidato alcalde de Torreón. ¿Será?
Nos leemos en la próxima… ¡no olvides compartirla!