Coahuila y Durango, son dos estados estrechamente unidos no solamente por estar pegados geográficamente uno al otro sino también por la historia, la economía, la cultura, la política, la idiosincrasia; pero sobre todo por el Río Nazas, que fue decisivo para que se formara la Laguna, región de 15 municipios: diez de Durango y cinco de Coahuila, que a su vez cuatro de ellos constituyen una de las zonas metropolitanas más importantes del país; comarca a la que sobre todo desde el gobierno de Lázaro Cárdenas, se le dio un tratamiento de un estado o entidad federativa.
En lo agrícola y ganadero se le dio a la Laguna un distrito de riego, un distrito deportivo que no dependía ni de Saltillo ni de la ciudad de Durango; un banco ejidal y un banco agrícola solamente para esta región; una ciudad industrial lagunera en Gómez Palacio, Dgo.; un Juzgado de Distrito, que mientras los otros llevaban el nombre del estado, el de aquí fue denominado Juzgado de Distrito en la Laguna, existiendo actualmente siete; y dio pie a que en 1968 se creara el Tribunal Colegiado del Octavo Circuito, con jurisdicción en los estados de Coahuila, Durango, Chihuahua y Zacatecas.
En materia de Seguridad Pública, también ha habido en la Laguna, y en los dos estados, coordinación policiaca con la creación de Mando Policial Unificado; pues las carreteras hacen de las principales ciudades de esta región, una zona conurbada por las que los delincuentes pueden pasar de un estado a otro; solo que el gobierno estatal no ha dejado que de Durango, se vengan al estado de Coahuila.
Últimamente transportistas y amplios e importantes sectores de la población de la Laguna de Durango, que están siendo víctimas de extorsionadores pertenecientes a una confederación sindical se han manifestado con pancartas, mítines, bloqueos de vías públicas que desquician el tránsito, y otros medios, en contra del gobernador Esteban Villegas, porque no está haciendo nada para acabar con la inseguridad pública que está azotando a nuestro vecino estado; uniéndose a ellos ciudadanos de todos los estratos sociales que colateralmente están sufriendo esta violencia.
En cambio en Coahuila, se está viviendo un ambiente de seguridad pública en el que la población respira aires de paz y de tranquilidad que hacen que trabaje con más ahínco y de más productividad y las familias vivan más contentas; por lo que la pregunta es: ¿por qué aquí sí y allá no?