En Gómez Palacio, donde la política a menudo parece más un espectáculo de variedades que una gestión seria, la figura de Betzabé Martínez Arango y su partido, Morena, se presenta como un número circense que, una y otra vez, termina decepcionando.
Betzabé Martínez Arango, protagonista principal del show político de Morena, actúa como una artista que nunca abandona el escenario. Ahora, como candidata a la alcaldía de Gómez Palacio, repite un guion gastado y predecible que interpreta al pie de la letra.
Cada aparición suya parece sacada de un viejo manual de propaganda: promesas ambiguas, frases hechas y una puesta en escena diseñada más para llamar la atención que para resolver los problemas reales del municipio.
Los líderes de Morena intentan mantener la ilusión de que representan un cambio verdadero, pero cada vez más ciudadanos se dan cuenta de que están presenciando el mismo acto de siempre: discursos vacíos, promesas recicladas y una preocupante falta de ideas frescas.
Con el telón electoral a punto de caer, los habitantes de Gómez Palacio se preguntan si alguna vez verán una propuesta política que no parezca una repetición aburrida. Pero por ahora, todo indica que el show de Morena seguirá en cartelera, con Betzabé Martínez Arango soñando con llegar a la alcaldía de Gómez Palacio.