Cuando ya se ha hablado todo y las explicaciones ya se han dado, lo mejor es retirarse y abrir un camino diferente para esa persona.
Porque entre más busques entendimiento, más se pierde uno mismo, y ¿para qué rogar para que te escuchen si al final te van a hacer a un lado?
No somos indispensables para nadie, es por eso, que debemos aprender a confiar en nuestra soledad, ya que vamos a vivir con ella siempre.
Si los problemas los provoca uno mismo, según la persona que se aleja de ti, lo mejor es retirarse. Quizás, dolerá, pero no seguir insistiendo, a veces, retirarse no significa rendirse, sino reconocer que hay momentos en los que es mejor apartarse para preservar la propia integridad emocional y mental.
Es como dar un paso atrás para poder ver la situación desde una perspectiva más clara y tomar decisiones más acertadas.