A través de un oficio enviado a la maestra Rosario Linares Lleverino, responsable estatal de la Dirección General de Educación Tecnológica, Industrial y de Servicios, trabajadores adscritos a diferentes planteles educativos denuncian y solicitan solución a múltiples irregularidades que se vienen presentando desde hace tiempo y que nadie parece preocuparse en atender.
El documento, del cual Sin Censura tiene copia, está firmado por los representantes sindicales del CETis 24; CETis 83; CETis 59; CBTis 127; CBTis 156; y CBTis 196; todos, pertenecientes a la sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, que actualmente dirige Arturo Díaz González.
La lista de denuncias externadas por los trabajadores de la educación es amplia, entre las más significativas, se encuentran “el acoso y el hostigamiento laboral en contra de compañeros trabajadores que se encuentran laborando en los planteles del estado”. Asimismo, denuncian y exigen que se solucione la asignación ilegal de plazas, eliminando las asignaciones realizadas con corrupción, entre otras.
El detalle es, que hasta el momento la DGETI se encuentra en una especie de limbo, pues quien ocupa la titularidad de la dependencia en Saltillo, es decir Linares Lleverino, se escuda en que nada puede resolver debido a que no se le ha entregado un nombramiento de forma oficial.
Y es que existen procesos al interior de los planteles que ya no se pueden ni se deben postergar, como lo es la emisión de las convocatorias de “promoción horizontal en los planteles de educación media superior de la DGETI, así como también la convocatoria para el cambio de jefe de recursos humanos en todos los planteles de la DDGETI”.
También están pendientes, por el mismo limbo administrativo en que se encuentra la dependencia educativa, la asignación de plazas administrativas en diferentes planteles, procesos que se llevaron a cabo de manera legal y transparente, de acuerdo con el documento. Pero también ocurre todo lo contrario, pues de acuerdo con los representantes que firman el documento en mención, “sigue sin resolverse la asignación de plazas que de manera ilegal se realizó durante el mes de abril en el CETis 24 con sede en Francisco I. Madero, por el actual director y ex secretario general del plantel, tomando posesión de un puesto que ya no ocupaba”. Añade: “aparejado a lo anterior, se eliminen las asignaciones realizadas con corrupción”.
De igual manera, los firmantes solicitan “que se valide y de trámite a comisiones sindicales para la representante de conflictos de educación media superior de la sección 35, secretarios generales y miembros del comité delegacional de cada uno de los planteles”.
Asimismo, solicitan de la comisionada estatal “el apoyo para que los compañeros puedan realizar los cambios de adscripción entre los planteles, debido a que muchos directores subjetivamente niegan los cambios”, dependiendo de los intereses personales y de grupos que existen al interior de los planteles y a cambio de prebendas y beneficios.
El documento añade que es también urgente que “cesen el acoso y hostigamiento laboral en contra de los compañeros trabajadores”, pues a muchos de ellos se les “emiten exhortos y extrañamientos sin darle el aviso correspondiente al secretario delegacional para que se encuentre presente al momento en el que se emita el mismo”.
Los docentes también solicitan “que no se incite a los padres de familia tutores y estudiantes a presentar denuncias en contra de la base trabajadora, por parte de las autoridades directivas de cada uno de los planteles, en específico, del CBTis 196, en el que por sus publicaciones en redes sociales motiva a la realización de quejas y denuncias de sus trabajadores, recordando que su obligación es recibirlas, no solicitar que se emitan”. Finalmente, exigen que se cumpla con lo establecido por el artículo 68 Bis de la Ley Federal del Trabajo y la NOM 037, en el sentido de que “se respete el derecho de los trabajadores a la desconexión digital, lo que significa que no pueden enviarse mensajes de WhatsApp a los trabajadores para solicitarles trabajo, información o cualquier otro trámite fuera del horario laboral”, lo que, de acuerdo a los afectados, es una practica recurrente por parte de los directivos.
