No nada más los grandes hombres y las grandes mujeres de la ciencia, la filosofía, la política, la literatura, el deporte, etcétera, son fruto de la historia y a su turno también hacen la historia, sino también a los del cine y el canto, como Jorge Negrete, que siendo producto de la post revolución en los años 30’s del siglo XX, también hizo historia en el mundo del cine y del canto.
Jorge Negrete, encarnó la reafirmación del nuevo mexicano que acababa de nacer de la Revolución, después de una dictadura de 30 años que censuraba al cine, a las canciones y a sus intérpretes.
Jorge Negrete, cantó a lo más hermoso de México: a las mujeres, al amor, a la valentía, al honor, al orgullo; evocó como nadie lo ha hecho a la bella Guadalajara y a Jalisco, y en la estampa potosina nombró a sus vecinos Nuevo León, Querétaro, Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas, Hidalgo y Veracruz; y desde luego le cantó a México, en el considerado uno de los himnos musicales: México Lindo y Querido.
Su imponente personalidad, su arrolladora actuación y su penetración en el pueblo de México, presentes en el cine nacional, lo proyectaron en el extranjero filmando en Venezuela, Canaima basada en la novela de Rómulo Betancourt, Presidente de esa República; y en España, Así Se Canta en Sevilla; además fue todo un éxito su gira por América del Sur, en donde cantó Adiós Pampa Mía, en Buenos Aires; Alma Llanera, en Caracas; Borinquén, en Puerto Rico; interpretando en otros países sus mejores canciones, como ningún otro cantante lo había hecho.
Su liderazgo natural, hicieron que Jorge Negrete, no solo destacara en las canciones y en el cine, sino también en el sindicalismo fundando la Asociación Nacional de Actores ANDA, que dirigió hasta su muerte.
Este 5 de diciembre se cumplen 70 años de la muerte de Jorge Negrete, en 1953, a la edad de 41 años, en los Ángeles, California, cuando andaba de moda su canción México Lindo y Querido; habiendo mandado el Presidente de México Adolfo Ruiz Cortines, un avión de la Fuerza Aérea Mexicana, para traer su cuerpo a México, donde en Bellas Artes, su ataúd fue cubierto por la Bandera Nacional, por haber sido alumno del Heroico Colegio Militar, izándose a media asta, guardándose 5 minutos de silencio en los cines y en las radiodifusoras del país.
Este humilde homenaje al Charro Inmortal, no solo es por ser el más grande intérprete de la canción ranchera, sino para mantener vivos los valores del mexicano que Jorge Negrete enalteció como nadie aquí y en el extranjero.