La mejor columna política de La Laguna, por SinCensura.

En Palacio Nacional, un día sí y otro también, desfilan quienes aspiran a la candidatura por la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Pero entran y salen sin decir nada. Dicen los que saben que la lista de aspirantes a esa candidatura —que es clave— se ha reducido en los últimos días ya que por motivos diversos salieron Martí Batres, Luisa María Alcalde y Rosa Icela Rodríguez, que se mencionaban con insistencia. Siguen en la lista Mario Delgado y Ricardo Monreal. ¿Les están despejando el camino?

Ya está definido. Aunque sus posibilidades de triunfo son menos que escasas, los partidos PAN, PRI y PRD, por fin se decidieron a entrar en acción y aprobaron el método para designar al candidato o candidata que abandere la coalición “Va Por México” en la elección presidencial de 2024. El lunes 26 de junio, los presidentes del PAN, Marko Cortés; PRI, “Alito” Moreno; y PRD, Jesús Zambrano, anunciaron la creación del “Frente Amplio Por México”.

Los cónclaves. El PAN durante la sesión extraordinaria de su Consejo Nacional, aprobó por mayoría calificada, su participación en consultas ciudadanas con el PRI y el PRD, así como la integración de una Comisión de Plataforma Electoral rumbo a la presidencial. El PRI en su sexagésima quinta —LXV— sesión extraordinaria del Consejo Político Nacional, aprobó de manera unánime la creación del Consejo Técnico Consultivo y los mecanismos de consulta para participar en la construcción de un Frente Amplio Opositor. El PRD, también, tuvo una sesión extraordinaria de su Dirección Nacional Extraordinaria, en donde aprobó la creación del Consejo Consultivo Permanente de Política Estratégica para las elecciones del 2024 con el que avalará mecanismos de la coalición.

Hay un montón de nombres de quienes quieren ser candidatos y candidatas; demasiados cuadros reciclados. En la larga lista solo un puñado puede ser tomado en serio; le sobran dedos de una mano para enlistar a quienes conectan y despiertan interés en una sociedad que no se ve reflejada en una oposición que lleva cinco años dormida.

¿Cómo lo van a elegir? Se establecieron tres etapas por las que deberán pasar los aspirantes. La persona interesada deberá de juntar al menos 150 mil firmas para poder participar en el proceso. Aplicación de sondeo de opinión —encuesta y ponderación de características— de cada aspirante para que solo queden tres participantes. Periodo de campaña y elección primaria entre julio y agosto. En el camino habrá recorridos, foros regionales y hasta debates. El anuncio del candidato o candidata presidencial será el 3 de septiembre. De ahí saldrá el “Responsable Nacional para la Construcción del Frente Amplio Por México”, con el fin de despistar al INE que cada día se muestra menos tolerante con el inicio anticipado de las campañas.

Se formó un grupo integrado por ex consejeros electorales y ex presidentes del IFE-INE, ex magistrados del Tribunal Electoral y miembros de la susodicha sociedad civil denominado “Consejo Electoral Ciudadano 2023”, mismos que pertenecen al “Frente Cívico Nacional” que tiene como eje a Claudio X. González, un enemigo acérrimo del PRI.

Este grupo, bautizado mediáticamente como “miniINE”, tenía como propósito blindar al PAN, PRI y PRD, de los actos anticipados de precampaña; analizaban la forma de darle la vuelta a la ley electoral.

El “miniINE” era coordinado por Leonardo Valdés Zurita, quien fue el último presidente del IFE y avaló la elección presidencial de Enrique Peña Nieto en 2012, entre múltiples evidencias del uso desbordado de dinero de origen desconocido. Valdés Zurita sustituyó a Luis Carlos Ugalde, otro acusado de complacencias con el fraude electoral del 2006, y a la vez, fue relevado por Lorenzo Córdova Vianello.

El método de elección para el “defensor de la democracia” que revelarán los dirigentes del PAN, PRI, y PRD, será todo, menos un mecanismo que lleve a los ciudadanos a encabezar esos esfuerzos de cara a la elección de 2024. Pues queda más o menos claro —hasta el momento— que el candidato o candidata no surgirá de las filas del PRI y menos del PRD, sino que será un panista, posiblemente sea Santiago Creel. Después de la derrota en el Estado de México, la ausencia de un candidato del priismo será la muerte del partido que gobernó por décadas a nuestro país.

Los partidos políticos que integran la coalición “Va Por México”, ahora autonombrado “Frente Amplio Por México”, que no ha podido detener la aplanadora electoral en que se ha convertido la 4T, se aferran a la unión que es un fracaso: han perdido 75% de las gubernaturas que han disputado juntos. En 2018, Morena no tenía ninguna gubernatura; cerrará este 2023 gobernando 23 entidades. El PRI, que tenía 14, ya solo será gobierno en dos. El PAN, que gobernaba 11, tiene únicamente cinco. Y el PRD ha sido borrado del mapa y ha perdido el registro como partido político en medio país. El éxito electoral de esa coalición, que solo existe en la imaginación de sus dirigentes, es la columna vertebral de su argumento para ir juntos en la candidatura presidencial que, al igual que el de Morena, se burlarán de la legislación electoral, pues de facto, será equivalente a una precampaña.

Según “RUBRUM” (junio, 2023), empresa especializada en sondeos de opinión en materia política-electoral, el gobernador Miguel Riquelme es el puntero de las encuestas al Senado de la República por Coahuila. Sus resultados lo avalan. La preferencia electoral del partido del tricolor a nivel estatal es del 49.8%. Y al interior del partido, Miguel Riquelme tiene el 56.1% de las preferencias electorales. Imparable.

Para el caso de los distritos electorales federales 5° y 6° por Torreón. La dirigente municipal del PRI, Verónica Martínez, será designada para contender por el 5° distrito federal, la zona urbana de la ciudad. En tanto, el diputado local electo Hugo Dávila, una vez que haya rendido la protesta de ley ante el Congreso Local, el 1° de enero de 2024, éste, solicitara licencia para separase del cargo y así poder contender por el 6° distrito federal, que corresponde a la parte oriente de la ciudad, incluidos, los municipios de Matamoros y Viesca. Se les cerró el mundo.

Por lo que podemos asegurar que el diputado suplente y actual regidor torreonense, Felipe González Miranda, mejor conocido como el “Felipayo”, asumirá el Congreso Local por ahí del 10 de enero de 2024. Veremos y diremos.

¿Por qué gano el PRI en Coahuila? La respuesta es del dominio público. El gobernador Miguel Riquelme cumplió a sus compromisos: recuperó la seguridad y la paz social; enfrento con valentía a la contingencia sanitaria que desencadenara la pandemia del COVID-19; detonó el desarrollo económico con la atracción de grandes inversiones —principalmente— en las regiones Sureste y La Laguna; mejoro significativamente la calidad de vida de las familias; pero lo más importante en términos políticos, es que logró la unidad al interior de su partido.

Sin embargo, el PRI de Coahuila tiene un claro problema generacional, fuera del tema Manolo Jiménez en Saltillo, no están renovando cuadros al interior. El próximo gabinete estará mezclado por un puñado de jóvenes talentosos y la vieja guardia.

El gobernador electo Manolo Jiménez asumirá su mandato el próximo 1° de diciembre y su coordinador de gabinete será Don Óscar Pimentel González. La próxima Legislatura del Congreso Local será lidereada por Don Carlos Robles Loustaunau, el consejero de la familia Jiménez-Salinas.

Algo muy similar sucede en Acción Nacional, el relevo generacional llego para quedarse, se trata del diputado local electo Gerardo Aguado Gómez, más conocido como “Quillo”. El mismo que le agandallo la candidatura al impresentable Marcelo Torres Cofiño; luego de la catastrófica votación que obtuvieron a nivel estatal —6%— era inevitable que desplazara a José Guillermo Anaya del liderazgo; deja atrás al panismo viejo y acartonado de Jorge Zermeño Infante y Juan Antonio García Villa. Bien.

Por eso, hoy más que nunca, el PRI de Coahuila requiere una depuración completa, empezando por su dirigente estatal, Rodrigo Fuentes Ávila. Un personaje que por muchos años no paso de ser un gris empleado estatal, regordete y pelón. Hasta que dio el brinco cuando llego a la Secretaría de Desarrollo Social en sustitución de Miguel Riquelme, quien fue electo para la alcaldía de Torreón.

Desde entonces, es sabida su traición y deslealtad a quien casi dos décadas le brindo su ayuda (por no decir que le dio de comer), y todo gracias a la ambición y avaricia de su compadre Fernando López Pérez, quien le enseñó las fraudulentas mañas para enriquecerse a costa del erario. Les bastaron solo tres años para cumplir su estafa maestra.

En el sexenio, ¿quién no se percató del fuerte distanciamiento que tuvieron estos dos tipos con el gobernador? El motivo, un desfalco equiparado a daño patrimonial por más de 200 millones de pesos. Al sentir que el gobierno se les vendría encima, estos tipos de cuidado, no solamente le dieron la espalda al su jefe, sino que corrieron como los buenos ladrones a buscar la protección e inmunidad política con el exgobernador Rubén Moreira Valdez. Eso explica por qué asumió la dirigencia estatal del PRI. Ahora, Rigo Fuentes ostenta de lo que tanto se quejó —de las injusticias de los más pobres— y la vida lo castigo convirtiéndolo en multimillonario. Perdió el piso.

Pues aprovechándose de las necesidades de los campesinos del Cañón de Jimulco, prácticamente, los despojo de sus tierras y les malbarató su patrimonio, en donde se convirtió en el nuevo cacique. Sin mencionar, la vida de lujos con que vive él, su familia y hasta sus amantes. Es dueño del hotel boutique “La Guayulera”. Y al exterior de sus oficinas, en la privada de la Calzada Colón, tiene toda una galería de autos de lujo: Mercedes Benz, Land Rover, Toyota, Honda, hasta una “Jeepeta”.

Por el estilo de vida que se da el disque “defensor de las causas sociales”, cualquiera diría que es una copia fiel del personaje que describe aquella canción titulada: “instrucciones para ser un pequeño burgués”. A ese nivel de corrupción se manejan en el PRI de Rigo Fuentes, Rubén Moreira y “Alito” Moreno… “Dios los cría y ellos se juntan”.

Los tiempos son perfectos. La buena noticia es que, con la llegada al poder de Manolo Jiménez, el PRI tendrá un nuevo respiro y renovará a su dirigencia estatal. No descarte que el alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda, pudiera ser el dirigente que represente al nuevo PRI de Coahuila. También, se escucha que será el diputado federal Toño Gutiérrez Jardón quien tome las riendas del Comité Directivo Municipal una vez que Verónica Martínez deje el cargo.

De manera simultánea, mientras se define el futuro de la dirigencia estatal del PRI y se nombra a él o la “Responsable Nacional para la Construcción del Frente Amplio Por México”, los cónclaves, al interior del grupo político del gobernador electo, Manolo Jiménez, están evaluando las condiciones políticas en cada municipios para definir a los mejores perfiles de cara a la contienda de 2024.

Nos hacen ver que, a más tardar en septiembre, habrá una fuerte decisión política para elegir al candidato por Torreón, está cerrada, y sólo hay dos: o se reelige Román Alberto Cepeda; o se le abre paso a Xavier Herrera para que sea el candidato por la alcaldía torreonense.

Off the record. Nos confirman que, en un cónclave de manera unánime fue palomeado Javier Díaz González para la alcaldía de Saltillo de 2024. Lo que nos lleva al siguiente planteamiento, ¿sí la llegada de un nuevo relevo generacional representa la extinción del grupo saltillense Martínez y Martínez-Frausto Siller?

En Viesca, el horno no está para bollos, la situación política del alcalde Hilario Escobedo, más conocido como “Layín”, es de completo abandono. Y es que se la ha rifado como “Dios” le ha dado a entender. Recordemos que este personaje entro a la candidatura con calzador, impulsado por Rigo Fuentes y su padrino político —en decadencia— el profesor Samuel Rodríguez, y como se sabe, ninguno forma parte del grupo político del gobernador electo, Manolo Jiménez. Su posibilidad de reelegirse depende —únicamente— de romper políticamente con ambos y prometer su lealtad incondicional al nuevo gobernador. Es el mensaje.

“El que con leche se quema, hasta el jocoque le sopla”. Por ello, no está de más alertar de un negocio que proyecta realizar el alcalde de Matamoros con cargo al erario. El Congreso Local aprobó la contratación de deuda pública hasta por 44 millones de pesos. El doble de la deuda pública que dejo el morenista Horacio Piña. Ya se frota las manos.

Sin embargo, como lo comentamos la semana anterior, “El Chafito” no dio el ancho ni para gobernar ni para cumplir con los compromisos que adquirió de manera pública con la ciudadanía. Su incipiente carrera política ya lo dio todo y el tema de su reelección ya no está en la mesa. Ya suenan nombres para sustituirlo en 2024.

Por un lado, el diputado electo Raúl Onofre Contreras no pierde la esperanza de imponer a su esposa Graciela Fernández Almaraz. Por su parte, “El Chafito” hace “changuitos” para que sea su cuñado, el regidor Genaro Hernández Jiménez. Y, por último, nos confirman que en la lista aparece el ex regidor, ex candidato a diputado local y ex secretario del Ayuntamiento, Alfredo Vázquez Rocha, más conocido como el famoso “Fredy” Vázquez.

Este último, en 2017, obtuvo 30 mil votos cuando fue candidato a diputado local por la alianza PPC-PAN-PES. En Matamoros registro 19 mil votos. Y durante su incorporación al PRI ha destacado por ser un cuadro político activo y de gran capacidad de organización social. No solamente tiene una estructura sólida a lo largo y ancho de Matamoros. Incluso, se habla de que puede sumar a sus ex compañeros del PPC, Jesús Contreras Pacheco y Leonel Contreras, más lo que se sumen. Alfredo Vázquez es un joven político cercano al gobernador electo, Manolo Jiménez, y es una carta fuerte para el relevo generacional matamorense. Ahí el dato.

El gobernador electo de Coahuila, Manolo Jiménez, durante su gira de agradecimiento por La Laguna convoco a los principales líderes políticos y sociales de los partidos políticos y de la sociedad civil que lo apoyaron en la campaña. Resaltó la participación ciudadana al aportar cerca de 300 mil votos, de los cuales 190 mil fueron de votantes de Torreón.

Al siguiente día, cerró con broche de oro, en un evento ante miles de personas que le brindaron su confianza en las urnas el pasado 4 de junio, a quienes refrendó su compromiso por mantener un estado seguro y de mejorar la calidad de vida de los coahuilenses. Para amenizar el evento de agradecimiento se presentó La Arrolladora Banda “El Limón” en un Coliseo Centenario que lució repleto de simpatizantes, militantes y dirigentes de la alianza PAN, PRI y PRD.

Como siempre es un placer, nos leemos en la próxima… ¡no olvides compartirla!