La maestra le pregunta a Jorgito:
- ¿Por qué llegas tarde?
El niño le contesta:
- ¡Ay maestra!, es que venía en mi caballo y que se sienta y ya no se quiso parar.
La maestra le dice:
- Bueno, ¿Y tú Pedrito, por qué llegas tarde?
El alumno le dice a la maestra:
- Ay maestra, es que venía en mi caballo y que se sienta y ya no se quiso parar.
La maestra pensativa por lo que oye, le pregunta a otro alumno:
- ¡Mmmm... bien!, ¿Y tú Pepito, por qué llegaste tarde? ¡Y tú no tienes caballo!
El niño le dice:
- ¡Ay maestra!, pues con tanto caballo sentado... no podía pasar.