POR: PEDRO BELMRES O.
Todos los hombres de mi familia han aguantado vara y sin llorar cuando han sufrido una perdida.
Recuerdo cuando tenía 14 años: falleció mi abuelo ALFREDO, y ver a mis tíos JAVIER, JOSE LUIS y JUAN, que no se quebraron al ver a sus hermanas y madre llorar. Lo que recuerdo que yo era un mocoso que dije una estupidez, mi tía LUCINA me estaba cargando y dije: ¿qué vamos a ser después? Vamos hacer una fiesta.
Dos años más tarde muere mi abuelo paterno, vi a mi padre romperse en llanto acurrucado a su madre en la funeraria, y después en el panteón lo vi muy tranquilo, como digo, aguantando vara
Años más tarde murieron mis abuelas, pero pasó lo mismo: mis tíos y mi padre son inquebrantables, muchas veces el hombre si se rompe pero no lo hace notar o lo hace cuando está a solas, en sí, el hombre tiene que ser muy fuerte para apoyar a la mujer.
Después, cuando falleció mi tía LUCINA, al ver lo mismos mis primos que fueron inquebrantables, no saben cuánto los admiro a mis tíos y primos.
Les preguntarías a ustedes ¿Qué se necesita para ser valientes ante una perdida tan grande?
Este 2 de julio de 2022 perdí a mi padre, intente ser fuerte como mis primos, saben es muy difícil y no soltar el llanto, pero lo intenté.
Cuando uno llega al punto donde uno no puede soportar más, al estar con mis hermanas, mi madre y mis 4 sobrinos, lloramos todos juntos por la ausencia, porque nos dejó nuestro señor padre.
