POR: EDUARDO GRANADOS PALMA
Analista Internacional en Seguridad,
Inteligencia y Defensa
www.CIASID.org
El presidente Biden recibió al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en la Casa Blanca para celebrar la primera Cumbre de Líderes de América del Norte (NALS, por sus siglas en inglés) desde 2016. Durante la Cumbre, los Estados Unidos, México y Canadá reafirmaron sus fuertes lazos e integración y, al mismo tiempo, trazaron una nueva ruta de colaboración centrada en poner fin a la pandemia de COVID-19 y promover la seguridad sanitaria; en la competitividad y el crecimiento equitativo, con inclusión del cambio climático; y en una visión regional de la migración. En cuanto al tema de la pandemia, se abordó el acceso equitativo a vacunas contra coronavirus; ante el panorama de inmunización poco alentador en algunos países de Centro América. Por otra parte, se dió seguimiento a la agenda migratoria de la región, en donde se trataron las causas de dicho fenómeno y la propuesta del gobierno de México de apoyar a la región. Destaca, desde luego, el programa Sembrando Vida, parte del Plan de Desarrollo para la Migración que ha emprendido AMLO en México y otros países como El Salvador. Además, se llegó a acuerdos para acelerar el crecimiento con equidad a través del fortalecimiento de cadenas de suministro para asegurar una recuperación económica más justa tras la pandemia y se analizó todo lo relacionado con el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Lo anterior surgió luego de asistir a una sesión del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en donde AMLO propuso la creación de un fondo para ayudar a 750 millones de personas que viven en situación de pobreza. La reunión es una oportunidad importante para que los líderes establezcan realmente la agenda en sus administraciones y cómo acelerar la cooperación en el crecimiento económico y la preparación para desastres y pandemias. Y, por supuesto, sobre la migración. Que es un tema clave para Estados Unidos y México. Las prioridades de colaboración incluyen la competitividad de Norteamérica, su capacidad de aprender de la pandemia y reconstruir mejor su estrategia ante los cada vez más profundos desafíos del cambio climático, la cooperación para fortalecer la seguridad nacional, colaborar en el tema migratorio. La primera de estas cumbres se celebró en el 2005, pero la más reciente tuvo lugar en el 2016. En las reuniones anteriores los líderes de los tres países acordaron una serie de propuestas a futuro que buscaban promover la competitividad de América del Norte, fomentar la cooperación en materia de innovación y tecnología y colaboración en sectores clave. En el pasado se enfocaron también en intentar alianzas en materia de energía limpia y cambio climático, trabajar para modernizar y mejorar los procesos de comercio y viajes transfronterizos, y ayudar a atender los retos de migración y desarrollo en Centroamérica. El fortalecimiento de esta asociación. La reunión de mañana será una oportunidad importante para que los líderes establezcan realmente la agenda en sus administraciones y, hasta ahora, cómo acelerar la cooperación en el crecimiento económico y la preparación para desastres y pandemias. Y, por supuesto, sobre la migración. Que es un tema clave para Estados Unidos y México es esencial para desarrollar nuestra capacidad de reconstruir mejor, revitalizar nuestro liderazgo y responder a una variedad cada vez mayor de desafíos regionales y mundiales. Con respeto por la soberanía de los demás y un verdadero espíritu de asociación, se debe reafirmar una visión inquebrantable de que América del Norte es la región más competitiva y dinámica del mundo. Al tiempo…
