POR: ABEL ALCALÁ H.
El motivo del presente comentario es con fines explicativos no justificativos, la explicación hace referencia a las causas próximas o lejanas que producen el fenómeno social, en esta ocasión el tema es la vialidad en Torreón.
Veamos el ambiente en que nos desenvolvemos en Torreón: funcionamos bajo una cultura relativista donde cada quien tiene su verdad; con actitud utilitarista, consideramos a los demás como “cosa” para beneficio nuestro; nos mueve el egoísmo e individualismo; procuramos siempre la inmediatez; todo los vemos superficialmente; sentimos aversión al dolor y al compromiso: la regla es hacerlo todo con el menor esfuerzo; somos consumistas y nuestros ingresos se desbalancean en detrimento de la familia y los hijos son considerados como una carga; el amor de largo plazo no existe, como pareja nos usamos para necesidades económicas, fisiológicas y pasatiempo, nuestra acera , manzana, barrio, colonia y el mismo Torreón no están entre nuestras prioridades, no movemos un dedo para cuidar y embellecer la ciudad.
Nuestra civilidad y dentro de ella de la cultura vial es mínima, ya que la civilidad demanda un comportamiento para cumplir con los deberes de ciudadano, respetar las leyes y contribuir así al funcionamiento correcto de la sociedad y al bienestar de los demás miembros de la comunidad.
Hagamos un ejercicio personal y tomemos el rol de agente de vialidad y observemos a los conductores en un trayecto de dos km por una avenida transitada y levantemos el censo de violaciones al reglamento de tránsito y vialidad en que incurren los conductores, tenga presente que el Reglamento de Tránsito y Vialidad contiene 189 infracciones.
Si continuamos con nuestro ejercicio sobre la cultura vial y lo llevamos a números y porcentajes sobre las principales reglas básicas y documentos personales que deben tener los conductores, podremos explicarnos mejor lo que sucede en la ciudad, veamos: del total de conductores cuántos tienen licencia: el 90, 80, 70, 60, 50%; Cuántos conductores tienen licencia vigente: 90, 80, 70, 60, 50 %.
De los conductores cuántos hicieron el trámite completo para obtener la licencia de manejo; 90, 80.70, 60, 50%.
Qué porcentaje de conductores aprobó; en el caso que lo haya presentado, el curso de manejo: 90, 80, 70, 60, 50,20%
Del total de conductores qué porcentaje conoce las 189 infraccione; 30, 20, 10%, recordemos que la ignorancia del reglamento no disculpa su cumplimiento.
De los vehículos (bicicleta, moto, carro, camioneta, camión, autobús, tráiler, etc.) que transitan por la ciudad qué porcentaje de ellos están en buen estado para circular y no ser causa de accidentes: 60, 50, 40%.
Con este ejercicio superficial sobre la actitud y conocimiento de los conductores sobre el Reglamento de Vialidad y Tránsito nos podemos dar cuenta de las causas de los accidentes e infracciones que se comenten a diario en el municipio.
Insisto no se trata de justificar a nadie, lo que importa es conocer las causas de los accidentes e infracciones que suceden para buscar las soluciones pertinentes.
Que los conductores cometan infracciones y accidentes no faculta a ninguna autoridad ni a los agentes de vialidad a actuar con abuso, exceso de fuerza, prepotencia y violencia verbal y física, siendo el conductor responsable de mantener una conducta cortés.
Una práctica muy usada por los conductores infractores es culpar siempre a terceros de su error u omisión y son los agentes de vialidad los más señalados; “Ven la paja en el ojo ajeno y no ven la viga en el suyo”; recordemos: Corrupción llama a corrupción, cuando el infractor no quiere recibir la sanción recurre al cohecho para evitarla.
Orden llama al orden; la seguridad del tráfico en la ciudad depende del conductor, cumplamos responsablemente conociendo y estudiando las Leyes y Reglamentos de Tránsito y Vialidad y cumplamos con los trámites honestamente. Conduciendo con cortesía habrá seguridad y respeto para todas las personas en las vialidades deTorreón.
