POR: EL TRINO
EL PASADO 6 DE OCTUBRE, los TRINOS conmemoramos el 84 aniversario de la firma del decreto con el que se dio inicio a la Reforma Agraria más importante que se haya llevado a cabo en la historia, no solo de México sino de América latina y hasta del mundo. Aquella decisión tomada por el presidente Lázaro Cárdenas le cambio la vida a millones de mexicanos, y a pesar de lo que pasó después, en su momento, el reparto agrario fue un acto de justicia social sin comparación en la historia del mundo. La Reforma Agraria, sería definitiva para que en México y en particular en la comarca Lagunera se diera una gran movilidad social.
El hecho de que a los antiguos peones acasillados de las haciendas algodoneras se les diera en propiedad comunal o ejidal un pedazo de tierra para sembrar algo y que el gobierno federal les diera crédito fue algo muy trascendente y a pesar de lo que pasó después el Reparto Agrario fue, definitivamente, lo que permitió el crecimiento y progreso de la comarca y, como mencionamos, una gran movilidad social.
Después, las cosas fueron cambiando: la corrupción, las variaciones en los mercados y muchos otros factores, fueron acabando con el modelo cardenista de producción ejidal. Vino la reforma salinista y de ejidatarios pasaron a ser propietarios rurales y los créditos al ya no ser los campesinos políticamente rentables fueron desapareciendo. Después de Salinas, los campesinos podían vender sus derechos agrarios y sus dotaciones de agua y al no tener ya créditos directos a bajos intereses poco a poco muchos fueron vendiendo sus parcelas. El modelo ejidal desapareció, pero a pesar de todo un buen número de campesinos se aferraron a sus tierras, su vocación es el campo y han continuado sembrando porque, como mencionamos, tienen esa vocación y ese arraigo a la tierra.
Aparte que muchos no saben hacer otra cosa. Bueno pues el pasado 6 de octubre, los campesinos de San Pedro de las colonias recordaron el 84 aniversario del Reparto Agrario y, paradójicamente, este 6 de octubre del año de la pandemia del coronavirus se aprobó en lo general la desaparición de los últimos fideicomisos que le daban vida a la Financiera Rural, y con ello, se pone fin a la estructura financiera que servía para dar créditos medio blandos a los productores del mentado sector social, antes ejidal. El pretexto para acabar con los apoyos al campo es que los campesinos ya no siembran, que entre el 60 y 70 por ciento ya vendieron la tierra y los derechos, que ya no habrá paternalismo y que ese recurso que se daba para financiar a los productores se irá para atender la crisis sanitaria y los proyectos prioritarios del señor presidente López Obrador.
Con tristeza, los TRINOS vimos como el presidente que dijo que primero los pobres y que en su campaña vino y prometió que habría dos apoyos para los campesinos al año, que habría crédito directo para los algodoneros de hasta 40 mil pesos y que habría crédito para semilla y fertilizante para todos los campesinos, le pone los últimos clavos al ataúd de los esquemas de apoyo para los campesinos del sector social. Es cierto, muchos ya vendieron sus tierras y derechos de agua, pero todavía entre el 30 y 40 por ciento de los productores siguen sembrando, siguen produciendo, siguen aferrados a su tierra, arraigados a su noble oficio. Bueno pues a esos campesinos laguneros, el señor presidente les regaló en su día, el 6 de octubre, la desaparición del último organismo que quedaba para apoyar sus actividades. Inclusive, cabe señalar que el 6 de octubre el presidente que tiene en el logotipo la imagen del general Lázaro Cárdenas no hizo ni una sola mención del Reparto Agrario, y de la gran obra que hizo el general Cárdenas para darle a millones de mexicanos la oportunidad de salir adelante con sus familias. Al final de cuentas, este presiente López solo uso la imagen y el recuerdo del general Cárdenas como todos, con fines meramente electoreros.
