POR: EL TRINO
EL PRÓXIMO MARTES, se conmemora un aniversario más de la expedición del decreto del Reparto Agrario, y a estas alturas, vemos con tristeza que el campo está cada vez más abandonado y que al final de cuentas el que le está dando la puntilla para acabar con la clase campesina de la comarca Lagunera, terminó siendo quien durante muchos años se ostentó como su redentor. Para el municipio de San Pedro, Coahuila; las actividades agropecuarias siguen siendo el pilar de su economía. Independientemente de todo lo que pasó, para los TRINOS el reparto de tierras que vino a realizar en este municipio en 1936 el general Lázaro Cárdenas, fue fundamental para el desarrollo económico, político y social de esta comarca.
Este municipio, que nació y se desarrolló gracias a la agricultura, hoy cada vez languidece más en medio de una terrible crisis económica, la cual, sumada a la crisis sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus y la epidemia del dengue que hoy vivimos, viene a poner a los habitantes de este municipio en un estado de postración grave, y la cosa se va a poner peor.
El Presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, obsesionado con su afán de venganza y resentimiento social, ha eliminado del presupuesto, con la complicidad de los diputados federales, la mayor parte de los apoyos que recibía el sector agropecuario y, para el año próximo, se anuncia prácticamente la desaparición de la Financiera Rural, y los pocos fondos que había para el campo van a desaparecer. El presidente, que como candidato se ostentó como el gran redentor de los más pobres de México, está dejando a su suerte a los campesinos de San Pedro. El político que se presenta como humanista y con un gran sentido social, al final de cuentas lleva a cabo una política más que NEOLIBERAL, y deja en las garras de la oferta y la demanda a lo que queda del sector social campesino.
Y, así las cosas, poco hay la verdad que celebrar este 6 de octubre, y entre los habitantes de los ranchos del municipio se percibe una gran decepción y, muy probablemente, esta decepción se va a transformar en un voto de castigo contra los candidatos de Morena. De por sí, en el partido que creo Andrés Manuel para llegar al poder se viven momentos muy decepcionantes para su militancia por la forma en que se designaron los candidatos, el anuncio de la eliminación del presupuesto de los pocos recursos que había para el campo reforzarán el ya mencionado voto de castigo que se viene contra el partido del presidente López Obrador, quien ya en la práctica está resultando más ladino y dañino que muchos de sus antecesores en la presidencia de la república.
Hablando de las elecciones, la presente campaña electoral para la elección de los diputados locales está resultando más que aburrida, y de no ser por los desfiguros de la candidata del Partido Zapatista, Juanita Ortiz Alzave y de Alberto Luna Durán, esta campaña sería más que monótona. Los principales candidatos, Armando Guerrero y Jorge Abdala, se la han pasado hablándole a sus audiencias. Por parte de Morena, ya trajeron dos veces al presidente nacional interino de ese partido, Ramírez Cuellar, pero esas visitas no han redundado en un impulso para la candidatura de Guerrero Viesca, quien sigue navegando en medio de una militancia morenista que más bien parece una manada de ambiciosos políticos arribistas, y Jorge Abdala se la ha pasado nadando de a muertito sabedor que en esta elección tan atípica con la pura estructura de su partido puede ganar fácilmente una elección en la cual, definitivamente, vamos a ver los primeros votos de castigo contra el partido que creo el presidente López para apoderarse del poder y, desde el poder, se ha dedicado a vengarse y a sacar su gran resentimiento personal.
