POR: EL TRINO
HACE UNOS DIAS, se dio a conocer la renuncia del jefe del departamento de fomento deportivo del ayuntamiento de San Pedro de las colonias. Este, es el segundo jefe de fomento que renuncia en los primeros nueve meses de la actual administración municipal, a la cual, la verdad le están saliendo algunas cosas.
Para empezar, el problema del abasto de agua potable sigue siendo una constante, aunque es justo y necesario reconocer que este asunto ha mejorado un poco. Siguen existiendo comunidades donde no sale ni una gota, pero de alguna manera la administración ha logrado llevar un poco mas de agua a muchas colonias de la ciudad y a muchos ejidos y, como les cuento, sin que se haya solucionado del todo el problema, las quejas han disminuido.
Los problemas con los drenajes siguen. Ya no como hace seis meses, pero siguen, y aunque no se ha resuelto todo poco a poco las quejas ciudadanas por las aguas negras bajaron.
En materia de seguridad, aunque definitivamente José Jesús Ponce no es un modelo de jefe policiaco, la verdad es que con sus detallitos la seguridad pública ha mejorado un poco y se ha logrado bajar el número de quejas por abusos policiacos. Bien o mal ahí la llevan.
En lo que se refiere a la economía local, esa no ha mejorado mucho, inclusive, en el comercio local se siente con mucha fuerza la cancelación de los programas sociales como PROSPERA y Proagro, ese dinero dejó de circular y aunque las pensiones de los viejecitos se duplicaron, esto no se ver reflejado en la economía local. En un pueblo como San Pedro de las colonias, cuya economía depende todavía en mucho de las actividades agropecuarias, ese tipo de programas eran necesarios para la subsistencia de muchas familias, pero como el Ganso Presidente de la República los canceló, ahora ese recurso dejó de circular en nuestro municipio.
De creación de nuevas fuentes de empleo, la verdad no hay nada ni se ve nada en el corto o mediano plazo. A la actual administración municipal, como les cuento, le han salido bien algunas cosas, como el asunto de lo que se organizó para las Fiestas Patrias, se revivió la Feria que se hacía en la plaza y se pusieron puestos y hubo bailes. La muy romana fórmula de pan y circo para el pueblo sigue dando resultado, aunque ahora fue más circo que pan y al final la cosa salió bien.
Pero donde las cosas no le han ido bien es en fomento deportivo. Se inició la administración con un titular traído de Monclova, Guillermo Amador, quien según esto era un león rasurado, una maravilla enmascarada para la planeación deportiva. Luego de unos meses, este señor se fue echando pestes, diciendo que dejaba el hueso porque no lo apoyaban. Durante unas semanas se quedó al frente de la oficina la señorita Manina Mata, una chica deportista de aquí mismo y las cosas iban más o menos y, cuando menos se esperaba, se abrió una convocatoria para nombrar a un nuevo jefe de fomento deportivo y el agraciado fue el profesor Hugo Baigorria, ex director técnico del equipo de futbol el Calor de San Pedro y director del club de futbol Victoria. Según cuentan, llegó muy filudo con muchos planes y proyectos. Por su formación de pastor evangélico, este señor es muy rollento y total, que a dos meses de su nombramiento, renunció que porque se va a Barcelona España a un curso para tener el gafete de entrenador en Europa.
Desgraciadamente, en muchas administraciones el asunto del deporte, la cultura, la historia y lo cívico se ven como un accesorio, algo solo complementario, cuando esto del deporte debería tomarse más en serio. En San Pedro, como en muchas partes, es muy difícil que el fomento al deporte de resultados, pues el presupuesto que se asigna siempre es manejado de manera centralizada por el alcalde en turno, y así quien llega no tiene con qué planear o diseñar una estrategia que de resultados.
En San Pedro, últimamente se tiene una camada de deportistas que están dando buenos resultados, pero definitivamente estos son producto del esfuerzo particular que del apoyo público. Ojalá, las autoridades no se vuelvan a equivocar y pongan en ese cargo a una persona que conozca al deporte local o que dejen a la señorita Manina, quien de perdido sabe liar con los polillentos deportistas locales.
