Julio le explica a Pedro:
—Estoy a dieta: solo como pescado... ¡pescado congelado! ¡Todos los días sin excepción!
Pedro pregunta:
—¿Ah, sí? ¿Y qué tal va?
Julio le responde:
—Pues... La verdad es que aún no he adelgazado... pero cada vez que paso ante una freidora... ¡me entran escalofríos!
* * * * * * * * * * *
Alfredito llega a casa con una mofeta.
— ¿Adónde te crees que vas con ese animal?
Le pregunta su hermana con cara de disgusto. Y él le contesta:
— ¡Lo tendré en mi habitación!
Aún molesta la hermana lo cuestiona:
— ¿Y qué piensas hacer con la peste...?
Alfredito lo piensa un momento y luego le dice:
— ¡Bah, ya se acostumbrará!
