No sé por qué, a veces pienso que la luz más brillante en mi interior, y mi fe es cada vez más fuerte, así los demonios se desvanecen, vencidos por el poder divino.
El maligno refleja el vacío de su existencia condenada; al final, los demonios reflejan el vacío de su existencia condenada por el fuego eterno.
Son solo demonios que reflejan el vacío de su existencia condenada por el fuego eterno. En las sombras de la medianoche, entre los callejones solitarios, salen los demonios y acechan a sus presas desprevenidas. Las cadenas de dolor y sufrimiento atan a las almas a su tormento eterno.
Son guardianes de los secretos más oscuros, los demonios conocen tus deseos más profundos. En los fuegos del infierno, son las llamas eternas, el que ha llegado a conocer este lugar horrible dicen almas arden, consumidos por su propia maldad.
Entre las sombras se oculta el adversario de Dios, en el mundo se encuentra el maligno con toda astucia y engaño busca la perdición del hombre. El maligno no puede contra su gran poder y se da por vencido, Dios le derrotará y hará justicia; prevalecerá el bien sobre la tierra.