Un contador está en un coche viajando con un cliente agricultor por su granja.
Pasan por un gran grupo de ovejas y el granjero le dice:
- Eres bastante bueno con los números, Keith. ¿Cuántas ovejas crees que hay en ese potrero?
El contador mira a las ovejas por un momento y dice:
- Mil ochocientos treinta y dos.
El granjero está asombrado. Y ante su respuesta le dice:
- Es exactamente... ¡¡Correcto!!. ¿Cómo lo resolviste tan rápido?
El contador le responde:
- Es fácil. Conté el número de patas y lo dividí por 4.