Antes de las elecciones los partidos que hacen coaliciones entre sí, se prometen “el oro y el moro”, como sucedió en las pasadas elecciones del 4 de junio de 2023, en Coahuila, en las que el PRI, le prometió al PAN, que si las ganaban, el candidato a la Presidencia Municipal de Torreón, en las elecciones del próximo domingo 2 de junio, sería del PAN; pero una vez que las ganaron por los votos de esos dos partidos y los escasísimos del membrete denominado PRD, y que llevaron a la gubernatura a Manolo Jiménez Salinas; ahora el tricolor se está echando para atrás.
Así lo ha denunciado Marko Cortés, Presidente Nacional del blanquiazul, revelando que el gobernador de Coahuila, no está cumpliendo; pues ahora quiere que el candidato a la alcaldía de Torreón, sea del PRI; revirándole Manolo Jiménez, que la condición para que el candidato fuese del PAN, era que éste partido obtuviera una votación de no menos del 20%; la cual no logró; pues apenas llegó al 6%.
En el acuerdo de la mencionada coalición el referido gobernador reveló que no obstante el bajo porcentaje del blanquiazul, su gobierno priísta le ha dado al PAN, secretarías de Estado, subsecretarías y organismos descentralizados y desconcentrados, direcciones, el Subsistema de Educación, el Instituto de Transparencia, Infraestructura Educativa, Agua o Junta de Caminos, direcciones de planteles educativos y universitarios, 6 notarías y la ratificación como Magistrado del panista Bernardo González Morales (Milenio-La Opinión-10-I-24).
No es la primera vez que el PRI, cogobierna con el PAN en Coahuila; ya desde el exgobernador Miguel Ángel Riquelme, le había dado notarías, subsecretarías, direcciones y otros puestos de importancia en la administración estatal; y en el Poder Judicial, nombró de magistrados a los destacados y honorables panistas licenciados José Ignacio Máynez Varela, Carlos de Lara McGrath y Ulises G. Hernández Torres, quien es el nuevo Presidente de la Sala Regional del Tribunal Superior de Justicia del Estado.
Estas concesiones del Ingeniero Riquelme, al PAN, fueron porque este partido estuvo a punto de ganarle la gubernatura al PRI, hace 6 años, con el candidato el Licenciado Guillermo Anaya Llamas, y cuyas elecciones se judicializaron; en una buena jugada política de ambos que fue en lo oscurito. Pero ahora el gobernador Manolo Jiménez y el dirigente nacional del PAN Marko Cortés, enojados, revelaron el acuerdo de reparto de puestos públicos y de candidaturas, que habían hecho en lo oscurito; siéndoles aplicable el refrán de: “enójense las comadres y díganse las verdades”.