Una adolescente, que se siente mal de salud, va con su padre al médico.
El profesional después de examinarla le dice:
- Mira, lo que te ocurre es que estás embarazada
La adolecente le mira asustada y exclama:
- ¡No puede ser, si mi padre se entera de esto me mata! ¡No se lo puedo decir!
El médico la tranquiliza diciéndole que no se preocupe, que él le dirá a su progenitor. Sale del consultorio y se encuentra con el papá y éste le pregunta:
- Doctor, ¿qué le pasa a mi hija?”
- Mire señor, su hija se ha tragado una medalla de la virgen. La medalla y la virgen se la hemos sacado, pero no al niño... no ha habido manera.