La soledad me acecha cada noche cuando apago las luces de mi habitación, es entonces, cuando comienza mi verdadero tormento al pensar en esas personas que solían significar algo en mi vida, esto perdura hasta que el sueño me vence.
La soledad parece querer que me aferre a ella, pero sé que no debería ceder, intento engañarla con una sonrisa y pretendo que soy feliz.
No quiero engañarme a mí mismo, trato de evitar abrir mi corazón nuevamente y arriesgarme a amar a alguien más en el futuro.
Aunque sé que nadie debería tener el derecho de vivir en mi corazón, mi mente me sigue atormentando con recuerdos del ayer.
Al final nos habremos dado cuenta que todos buscamos el amor y porqué la soledad nos causa miedo. Enamorarse o tener un amor es un anhelo profundo que tenemos los seres humanos, el camino para no sentirnos en soledad. Es la conexión con otros seres, en la amistad y el amor, en el compartir de sueños y temores, que hallamos consuelo.