Terminó noviembre, histórico mes en el cual la Ciudad de México vio desfilar dos multitudinarias marchas. El presidente no solamente sale ileso de estos acontecimientos, sino fortalecido. No hay un solo indicio de que haya perdido el control de la agenda política. Por el contrario, lo que vimos parece haber estado dentro de su lógica y de sus cálculos.
La Reforma Electoral tiene para él una importancia igual a cero. El tema nunca le resultó prioritario. De otra manera, lo hubiera promovido desde el primer año de gobierno, cuando impulsó los cambios constitucionales que creía decisivos.
Lo que López Obrador busca con el tema electoral es leña para hacer arder el fuego de la polarización. Porque a su modo de ver eso era y es clave para mantener vivo su movimiento de cara al 2024, algo que solo puede concebir como parte de una confrontación permanente entre dos bandos.
Pero la iniciativa de Reforma Electoral, en realidad, no ha sido más que un pretexto para movilizar a los suyos y provocar a sus adversarios, los cuales mordieron el anzuelo de forma por demás predecible. Recordemos que durante la semana previa a la marcha del domingo 13, López Obrador se dedicó prácticamente diario a hablar del tema en las mañaneras, a descalificar a quienes pensaban tomar las calles y darles una difusión que no hubieran tenido en sueños. Fue así como la oposición salió a marchar en números que no se habían visto antes.
Luego llegó la marcha del 27, la cual terminó como se esperaba, nada más. A la oposición le ha resultado sencillo atribuir la multitudinaria asistencia al “acarreo” de manifestantes y al empleo de recursos públicos —que ciertamente los hubo—. Pero el hecho es que ni con eso los gobiernos previos (los gobiernos previos, no la sociedad civil, sin la ayuda de partidos políticos). Esta movilización, rompió todos los esquemas, de ahí la necesidad de superarla, a cualquier precio, por parte del Presidente.
La marcha del 27 no tuvo el éxito esperado, porque, el gobierno, con todos los recursos y todos sus gobernadores, pudieron hacer que pasará a la historia por el número que desfiló por el Paseo de la Reforma, sólo superó a los ciudadanos, por 400 mil personas de todo el país, siendo que, con solo los habitantes del Valle de México, hubiera reunido, el doble o el triple de lo que reunió, a pesar de la presencia del propio presidente allí, rodeado de cientos de miles de personas, como era de esperarse.
Y como se había anticipado, MORENA y sus aliados —PT y PVEM— avalaron el “Plan B” del presidente Andrés Manuel López Obrador tras el rechazo del dictamen de la Reforma Electoral que no alcanzó la mayoría calificada en San Lázaro, pues obtuvo 269 votos a favor y 225 en contra.
Recordemos que el “Plan B” contiene las modificaciones a las leyes secundarias en materia electoral y cambios significativos a la estructura administrativa, límite a facultades y reducción al presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE). El Pleno aprobó en lo general las reformas a la Ley General de Comunicación Social y a la Ley General de Responsabilidades Administrativas, en materia electoral y más tarde lo hizo en lo particular para pasarlo al Senado de la República para continuar con su trámite legislativo.
La iniciativa con proyecto de Decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversos ordenamientos en materia electoral, señala que se compacte la estructura orgánica del INE; que los órganos distritales sean temporales y se reduzcan de 300 a 260 durante periodo no electoral. Se estima que el ahorro aproximado será de 5 mil millones de pesos. En lo particular, el proyecto se aprobó con 267 votos a favor, 215 en contra y ninguna abstención, con una modificación aceptada por la Asamblea para agregar un inciso K al artículo 5° de la Ley General de Comunicación Social, para que los entes públicos en la materia observen el principio de interculturalidad.
Elimina la rama administrativa del Servicio Profesional Electoral Nacional; unifica el programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) con el cómputo de la elección; establece que los consejeros del INE y los magistrados electorales del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tengan un salario inferior al del presidente de la República. Elimina dos Salas Regionales que no entraron en funciones y la Sala Regional Especializada del Tribunal Electoral cuyas atribuciones serán absorbidas por la Sección Resultora de la Sala Superior del TEPJF.
Además, especifica la entrega de dádivas, bienes o servicios, presiones y condicionamientos del voto de las personas candidatas o partidos políticos durante los procesos electorales. Garantiza el voto de las personas que se encuentran en prisión preventiva, así como el voto de las personas con discapacidad en estado de postración y facilita el voto de los mexicanos residentes en el extranjero, mediante el uso del internet y al permitir su ejercicio con la presentación de pasaporte o matrícula consular.
Otro de los cambios establece la creación del Procedimiento Único de Queja en materia electoral, mediante el cual se sustancian y resuelven los asuntos relacionados con la fiscalización y la remoción de consejerías de los Organismos Públicos Locales (OPL), y se deja íntegramente el procedimiento especial sancionador.
Nos platican que apenas se apruebe o rechace la Reforma Electoral, iniciará en San Lázaro una serie de batallas entre las bancadas oficialistas y opositoras. La primera es la reforma presidencial para cambiar las reglas del Tribunal Federal de Justicia Administrativa, que ya se aprobó en Comisiones y quedará enlistada para pasar al Pleno. La siguiente, nos recuerdan, será el proceso para elegir a los consejeros del Instituto Nacional Electoral que, nos hacen ver, ya anticipa un amplio desacuerdo que podría llegar hasta la insaculación. Así, se prevén días convulsos en la Cámara de Diputados, en donde la bancada de MORENA se encuentra dolida por la imposibilidad de que se apruebe la reforma político-electoral del presidente López Obrador.
Pero hay más. Se cumple un mes que la exintegrante del Consejo General del Instituto Electoral de Coahuila (IEC), Gabriela María de León Díaz, concluye su periodo por siete años como presidenta del órgano colegiado. Tomó posesión en 2015, y organizó los comicios electorales de 2017, 2018, 2020 y 2021. Sin embargo, deja un oscuro antecedente en su gestión.
En 2020, se publicó un negocio de 39 millones de pesos que se consumó a través de las urnas, lápices y mamparas adquiridas para la jornada electoral que se celebró el 18 de octubre del mismo año; y que fueron adquiridas a la sociedad mercantil “FORMAS FINAS Y MATERIALES, S.A. DE C.V.”, con un sobrecosto de casi 20 millones de pesos.
El sobreprecio es tan burdo que, para dimensionarlo, la misma empresa vendió, en 2018, los mismos materiales electorales al IEC para la elección de ayuntamientos en 20 millones 690 mil pesos, exactamente, los mismos en cantidad y calidad, aunque casi a la mitad de su valor.
Ese mismo año, antes de la contingencia sanitaria por COVID-19, el IEC aprobó una adquisición extra de 1 millón 864 mil 334 pesos para la conclusión de su nuevo edificio a favor del contratista preferido de Gabriela de León desde su origen, Efrén Miguel Ayala de la Garza. Dicha cantidad, sumada al costo inicial, da un total 76 millones 861 mil 697 pesos por la polémica obra.
Nos detallan que Gabriela de León fue acomodada en el IEC por órdenes Armando Luna Canales. Quien la propuso bajo el argumento que tenía control sobre ella. Al tiempo se comprobó que no fue así. Y que ella sólo obedecía a los caprichos de su pareja, quien, en algún momento hasta la golpeo y un periódico de Saltillo ventilo la información.
Otro dato que no pasa desapercibido es que su consorte Francisco Alfonso Ríos Gamiño se fue con viáticos pagados por cuenta del IEC a unas merecidísimas vacaciones, digo, capacitaciones a España. Pero no falto quien le pusiera dedo en cuanto a que se daba la gran vida deleitando tapas y degustando vinos lujosos en los mejores bistrós y bares de los barrios más exclusivos como Paseo de la Castellana, los Jerónimos, Chamberí o la Gran Vía en Madrid.
Por otra parte, ya enfocados en el proceso electoral que inicia el 1° de enero del 2023. En donde no hay dudas que serán auditados los presuntos actos anticipados de campaña de algunos precandidatos. El consejero presidente del IEC, Rodrigo Germán Paredes Lozano, en vez de declarar que va a sancionar o hasta negar el registro aquellos que realizaron dichos actos. Hoy tiene un desafío mucho mayor: brindar certeza y confianza a la ciudadanía del proceso electoral en puerta.
Y ese desafío consiste, principalmente, en auditar y sancionar la turbia gestión administrativa que deja Gabriela María de León Díaz en el IEC. Hasta donde se sabe, Rodrigo Paredes, tiene su origen y formación dentro del INE, de hecho, llega al nuevo cargo de consejero presidente impulsado por Lorenzo Córdova y Ciro Murayama. Bajo esta premisa, el árbitro electoral carece de legitimidad. ¿Pasará su primera prueba del ácido?
Ya estamos a 176 días de las elecciones para gobernador de Coahuila en 2023. Y tanto Manolo Jiménez Salinas del PRI y Ricardo Mejia Berdeja de MORENA, aunque en algunas encuestas, Mejía es superado por Luis Fernando Salazar y hasta por el "Viejo del Sombrerón" sin embargo, hay quienes, a este momento —previo— del proceso electoral en un claro empate técnico, entre Mejía y Manolo, según esto, si se toman como referencia una media entre todas las encuestas realizadas en el último mes. Sin duda, esto resulta muy favorable para una verdadera competencia político-electoral, pues ninguno de los equipos de “war room” puede aludir que está en desventaja uno del otro.
MORENA quien actualmente gobierna 22 estados, buscará arrebatarle al PRI uno de sus últimos bastiones, será antes del día 12 de diciembre cuando designe a Ricardo Mejía Berdeja como el coordinador de los Comités de Defensa de la 4T en Coahuila, y virtual candidato del partido por la gubernatura. Aunque esto rompa el proceso de selección, que determina, que será por encuesta, la designación.
Dentro de MORENA ha recibido buenos comentarios del propio presidente Andrés Manuel López Obrador, quien, aunque dijo que no se quiere meter en el proceso interno de MORENA, recientemente, desde su conferencia mañanera elogió a Ricardo Mejía Berdeja. A pregunta expresa sobre el cierre de las encuestas internas de MORENA para designar al coordinador de los Comités de Defensa de la 4T en Coahuila, el presidente calificó a Ricardo Mejía Berdeja como una gente trabajadora y honesta.
Por otro lado, una encuesta realizada por la firma De Las Heras Demotecnia y publicada por El Universal en el mes de noviembre, colocó al priista Manolo Jiménez Salinas, actual secretario de Inclusión y Desarrollo Social de Coahuila, como el aspirante favorito para asumir la gubernatura. Al ser medido con sus propios compañeros tuvo una opinión positiva del 82% de los encuestados.
A diferencia del Estado de México, donde la candidatura de la alianza PRI, PAN y PRD para las elecciones de 2023 se definirá por encuestas, en Coahuila ya hay un acuerdo entre los tres partidos para que el candidato sea el priista Manolo Jiménez Salinas. PAN y PRD reconocen que el expresidente municipal de Saltillo tiene el mejor perfil para retener la gubernatura y evitar que MORENA arrebate a la oposición ese que es uno de los últimos bastiones del PRI. En la alianza “Va por Coahuila” consideran que Manolo Jiménez puede enfrentar al aspirante que sea postulado como candidato de MORENA.
Sin embargo, hasta donde se sabe, siguen las negociaciones de estira y afloja entre los tres partidos que componen la alianza “Va por Coahuila”. Uno de los señalamientos que hace Acción Nacional es que, en Durango, donde fueron en coalición y cedieron la candidatura a favor del priista Esteban Villegas Villarreal. No les han cumplido ninguno de los acuerdos que se firmaron. Y en el caso del Sol Azteca, donde la franquicia le pertenece a Mary Telma Guajardo, simplemente, están a lo que les ofrezcan. Dicen que mientras no los dejen sin cobrar la quincena ellos firman cualquier alianza.
Otro candidato a gobernador muy popular, fue José Rosas Aispuro Torres, y salió, bueno, pa’ qué les digo. Nos hacen ver que, hasta el momento, nadie dentro del PAN se ha atrevido a siquiera deslizar una tímida defensa del exgobernador de Durango, quien se encuentra en el ojo del huracán por la supuesta corrupción durante su mandato. Ya fueron detenidos tres excolaboradores suyos, entre ellos quienes manejaron los recursos públicos y al parecer de manera no muy honesta. Y ahora, la Fiscalía Anticorrupción duranguense abrió una indagatoria contra su esposa, Elvira "N", por enriquecimiento ilícito. Los jueces dirán si Rosas Aispuro y sus cercanos delinquieron o no. Pero no deja de parecer extraño que ningún panista ni a nivel estatal ni federal haya salido en su defensa. Y los perredistas, que también lo apoyaron electoralmente, menos. Ahí el dato.
Ahora, hablemos un poco de Torreón. Esta semana, el alcalde Román Alberto Cepeda González rindió su 1er Informe de Gobierno sin mayor sorpresa y para variar, fue otro evento gris como él mismo. El primer ejercicio de su gobierno se caracteriza por continuar con una tendencia al modelo Peña Nieto. Es decir, un gobierno que le apuesta a la foto, los likes y los medios de comunicación. Sin embargo, hay ausencia total de obras públicas y servicios en general que son los rubros más importantes que debe atender el Ayuntamiento. Sin mencionar que fue el año de la corrupción y opacidad. Son más los casos de conflicto de intereses por parte de los integrantes de su gabinete que las acciones logradas por su gobierno.
Pero no todo son malas noticias, por fin, se ve la luz al final del túnel. Nos platican que iniciando el 2023, en la primera quincena, vendrán los primeros cambios en el gabinete municipal de Román Alberto Cepeda. Tome lápiz y papel, anote usted.
La salida de Natalia Guadalupe Fernández Martínez, titular de la Secretaria del Ayuntamiento por las quejas, malos tratos y sobre todo por la presión de parte de regidores y síndicos que ya no la soportan. Llega en su lugar de Martha Ester Rodríguez Romero, actual presidenta del Tribunal de Justicia Municipal y Administrativa.
La expulsión de Amira Darwich García, titular de Garantías, Infracciones y Parquímetros, por su insistente toxicidad en seguir hablando pestes de su jefe Román Alberto Cepeda. Dicen que será la primera en irse. Se escucha muy fuerte el rumor que regresa el tal Héctor Yassín a Torreón. Y por invitación de su amigo el alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda, nos hacen ver que llegará de titular a esa posición en enero del siguiente año. ¿Será?
Otro cambio que ya habíamos anunciado es la llegada de Omar Bravo Galarza, a quién su amigote Román, no le ha hecho justicia, a pesar de todos los servicios y apoyos prestados.
También, está confirmada la salida del titular de Desarrollo Social, Héctor Iván Estrada Baca, quien va de suplente en un distrito local. Pero tal parece que es una salida digna ante su fracaso como responsable de mejorar las condiciones sociales y humanas de los torreonenses. Habrá más sorpresas.
El PRI defenderá uno de sus últimos bastiones —el otro es Edomex— con un despliegue de cuadros riquelmistas con amplia experiencia operativa. Sin embargo, al ir en alianza con el PAN y PRD, tendrá que ceder algunas candidaturas para amarrar los votos suficientes de los tres partidos para la gubernatura de 2023. Nos detallan que ya están palomeados la mayoría de las y los candidatos a las diputaciones locales. En el caso de La Laguna, anote usted y no los pierda de vista.
Por el 4° Distrito, va en caballo de hacienda el líder de la CNC de Coahuila, José Natividad Navarro Morales. Según nos comentan, las negociaciones apuntan que el diputado local Jorge Antonio Abdala Serna será el candidato a la alcaldía de San Pedro de las Colonias en 2024.
Por el 7° Distrito, ira la profesora Graciela Fernández de Onofre. Nos dicen que su esposo Raúl Onofre Contreras amarró fuerte la candidatura. Es un secreto a voces que el ingeniero Onofre Contreras sigue manteniendo el control político y cacicazgo de Matamoros.
Por el 8° Distrito, se presume la reelección de la diputada Olivia Martínez Leyva. Aunque no se descarta que en próximos días haya un sorpresa y se defina que sea para un panista de alto impacto. Las negociaciones aún están en la mesa.
En el 9° Distrito, se confirma que será Raúl Garza del Valle, actual director de Egresos y el cuadro político de mayor fortaleza de Román Alberto Cepeda. En redes sociales sobresalen sus actividades con liderazgos a lo largo y ancho del distrito, la gente lo quiere, y parece que tiene muchas posibilidades de triunfo.
En el 10° Distrito, hubo cambios y no ira el regidor Felipe González Miranda como se tenía previsto. En su lugar va el panista Marcelo Torres Cofiño, exdiputado y excandidato a la alcaldía de Torreón. El liderazgo de Torres Cofiño será un aliciente para levantar la votación a favor de Manolo Jiménez ante la embestida que MORENA y sus candidatos le preparan.
Y por el 11° Distrito, será la regidora Xóchitl Cepeda Rodríguez pues al parecer fue la moneda de cambio para la permanencia del Profe Mario Cepeda y su familia en el PRI y con Manolo Jiménez. Por cierto, brinca el dato, que su esposo Jaime Pica le tiene organizado un evento masivo a Ricardo Mejía Berdeja este sábado en la colonia Nueva California, bastión de la familia Cepeda Ramírez.
Como siempre es un placer, nos leemos en la próxima… ¡no olvides compartirla!