HACE UNOS DIAS los sampetrinos celebramos, como en todo México el Día de los Muertos, y como ya es costumbre, fuimos a visitar a nuestros fieles difuntos y otra vez volvimos a observar las graves carencias y el gran deterioro de las instalaciones del panteón municipal. Para empezar, el panteón tiene ya años que está saturado. Las anteriores autoridades locales habían anunciado que se abriría una nueva sección del panteón en un terreno ubicado al sur del camposanto pero por cuestiones sanitarias no se puede ampliar el actual panteón porque las modificaciones a las leyes de regulación sanitaria los nuevos panteones tienen que estar ubicados a mínimo 5 kilómetros de los centros de población, y nuestro ya antiguo panteón está ya en medio de la mancha urbana.
Hace unos años, en la administración municipal sustituta de Fernando Ortiz, se compró un terreno para ampliar el panteón pero no se pudo por las cuestiones de regulación sanitaria y aquellos terrenos se usaron para la creación de un proyecto de vivienda que terminó siendo la colonia Francisco I. Madero. Desgraciadamente, no se ha dado ya algún nuevo proyecto para instalar un nuevo panteón y si bien se tiene un panteón probado al norte de la ciudad y las hermanas Adoratrices tienen un columbario, esos lugares son para personas de recursos económicos desahogados, y mientras tanto, nosotros los pobres tenemos que esperar a ser sepultados en el ya saturado panteón municipal donde nos van a terminar enterrando parados. Otro grave problema que existe en nuestro antiguo panteón es el del vandalismo. La mayor parte de las tumbas han sido ya vandalizadas. Los daños en las sepulturas son muchos. Hay un gran abandono tanto por parte de las autoridades como de los ciudadanos a los cuales ya de plano les valió. Y como suele suceder, nada más para estas fechas se acuerda uno del panteón y otra vez surgen las quejas y comentarios.
Durante su campaña, el actual alcalde hablo del proyecto para construir un columbario para que en nichos se pueda colocar los restos de las personas que así lo deseen. Serían espacios pequeños en los que preferentemente serían colocados los restos de las personas que fueran incineradas, pero el problema seguiría porque muchas personas por sus creencias o simplemente por su propio gusto querían ser sepultadas de cuerpo entero. Por lo pronto, el panteón de San Pedro de las colonias sigue con su deterioro y abandono.
Cambiando de tema y hablando ya no de muertos si no de grillos que se pasan de vivos. Oiga usted, que corrientes y vulgares nos siguen saliendo los amigos del partido del presidente de la República. Con el pretexto de llevar a cabo sus mentadas asambleas informativas siguen haciendo actos de campaña más anticipados que nada, el último tuvo lugar hace unos días en el ejido San Lorenzo, en donde estuvo el candidato del presidente a la gubernatura Ricardo Mejía Verdeja, quien sin pudor alguno pidió ya el voto para su causa para que, dijo, siga la Trasformación y para según él, salvar a Coahuila de los corruptos priistas. Y la verdad al ver al mismo Mejía Verdeja y la bola de pillos de origen priista que lo acompaña, lo único que uno puede decir es Señor, Sálvanos de nuestros salvadores. Si Ricardo no pudo como sub secretario de seguridad federal, detener la delincuencia y la matazón en el país. Usted cree que va a poder gobernar a nuestro estado. Para muestra basta un botón: ahí está Sonora, actualmente gobernada por el señor Durazo, quien fue jefe del junior torreonense más acapulqueño. Sonora vive hoy una ola de violencia terrible bajo el gobierno de Morena. Ojala, los coahuilenses la piensen bien a la hora de votar. No nos vayamos a ver en el 2024 en la misma situación que los sonorenses…