IMPROVISACIÓN = OCURRENCIAS = MALOS GOBIERNOS (SAMUEL GARCÍAS Y ROMÁN)
Cuando un individuo no es apto para gobernar, o sea, que fue producto de la ocurrencia de alguien, o porque no había más y se improvisó, las consecuencias y los resultados, son nefastos.
En el primero de los casos, tenemos a Samuel García, el hoy, flamante gobernador de Nuevo León; el segundo, sería el del rústico y mentiroso, alcalde de Torreón.
En Nuevo León, donde, se supone que la mayoría de la gente tiene un promedio de educación por encima del resto del país, una campaña infantil, llena de ocurrencias y actuaciones, cual si fuera un programa de bobos para televisión, Samuel García y su “influyente” esposa, lograron ganar la elección a la gubernatura, sin tener ni la mínima idea de lo que esto significaba, ahora, viven la cruda realidad, pues, ya lejos de las redes sociales y de los aplausos de los medios, Samuel García, gobernar, ya no es tan divertido como lo fue la campaña. Samuel García, sabía que tenía por delante (a menos que nadie le advirtiera), el gran problema de la escasez del agua para toda la zona metropolitana, en virtud de que las presas que abastecen del vital líquido, simplemente, están secas. Así que, al asumir el poder, con lo primero que se encuentra, es con la exigencia, la irritación y el encabronamiento de la ciudadanía, porque, casi toda el área metropolitana, no tenía (ni tiene todavía), agua para todas las necesidades básicas. Así que ahora, el flamante gobernador, culpa a la CONAGUA porque no llueve y se decidió a bombardear las nubes (que no hay), para provocar la lluvia y resolver el problema. ¡Ocurrencias, no soluciones!
En nuestro querido Torreón, a alguien se le ocurrió, que Román Alberto –se enreda- perdón, Cepeda, porque ha navegado sin pena ni gloria por la burocracia gubernamental, podría ser alcalde de Torreón. Y lo es, pero con tan mala suerte, que el tipo no tiene ni la más mínima idea de lo que es gobernar un Municipio tan complejo, como lo es Torreón. Así que, como Samuel García, según él, no sabía de que existía un gran problema por la falta de abasto de agua, cuando toda su campaña prometió: “Agua para todos, las 24 horas del día”. Pues bien, no pasó ni una semana, cuando comenzó el desmadre porque en casi todo Torreón, no salía ni una gota del vital líquido, en el 70% del municipio.
El tipo, tardó cuatro meses, en darse cuenta de la gravedad del problema y, como Samuel García, comenzó a justificarse, diciendo que la pasada administración, le había dejado un tiradero en el SIMAS y, para tratar de calmar los ánimos, recurrió a un anuncio de 12 puntos, para resolver el tremendo problema, de los cuales, no ha cumplido –al menos así se observa-, ni con 4 de esas soluciones, por cierto, algunas sacadas de la manga y otras ya desgastadas. Ya pasaron dos meses de esa brillante solución y, lo único que ha presumido, es la terminación de uno de los ocho pozos nuevos que prometió.
Y como no tiene control sobre el equipo de trabajo que lo acompaña en la aventura, apenas, después de cuatro meses de “gobierno”, publicó en la página de transparencia del Portal de Torreón, una parte de la información, que por ley, tuvo que publicar desde el primer día de su mandato. Y ¿qué creen?, al consultar esa información, y solo en el apartado de medios de comunicación, saltó un portal Web, al que, en cuatro meses, se le pagaron 600 mil pesos y no hay rastro de él, porque fue borrado y el link que está activo, remite al sitio que vende y aloja, los nombres de las empresas. O sea, fue contratado para cobrar y, una vez obtenido el pago, desapareció del portal del municipio (aunque SinCensura, se tomó la molestia de bajar los archivos, antes de ser bajado, así que, muy pronto les daremos datos precisos, sobre el contratante y de lo que en el sitio se publicó, hasta antes de ser borrado).
Durante la semana pasada, el conductor del Programa de Televisión de SinCencura por Internet, abordó al alcalde para preguntarle qué opinión tenía del Sitio Web fantasma que se llevó 600 mil pesos de los torreonenses, a lo que el cínico contestó: “no lo leo”, cuando todos en la presidencia, saben que manda recoger la edición impresa del periódico, cuando ve que no le conviene lo que se publica sobre él.
Pero no solo fue eso, cuando el conductor del programa le preguntó que si asistiría al estudio de SinCensura digital para una entrevista, -se enreda- perdón, Cepeda, le contestó: “Ya quiéranme, poquito”. Frase que nos hizo recordar a Enrique Peña Nieto, cuando, al terminar una rueda de prensa en la que nombró a Virgilio Andrade como Secretario de la Función Pública, cuando se vio obligado a dar la cara por el escándalo de la Casa Blanca, al término de la reunión, todavía con el micrófono abierto, dijo: “Ya sé que no aplauden”. Como si los medios de comunicación, estuvieran para aplaudir y echar porras a un gobernante por hacer su trabajo.
Desde ahora, Román –se enreda- perdón, Cepeda, ya está envuelto en un problema. Si pagó 600 mil pesos a un portal de internet fantasma, estaría cayendo en el supuesto delito de peculado. Con todo y que, firmaron el contrato sus principales colaboradores, el director de comunicación social, el prestador de servicios, Rogelio Eduardo Soto Muller, Dulce María Mijares Villarreal, Gabriel de Jesús González Aguilera, Víctor Martínez Navarro Arratia, Luis Alberto Quesada Ibarra y el Tesorero, Oscar Fernando Luján Fernández. Cree –se enreda- perdón, Cepeda, que, porque él no firmó, queda exento de culpa, ¡mjm!
