POR: LA COMADRE
A los expresidentes del PRI que en la pasada reunión del 14 de junio en la sede nacional priista, optaron por creerle “Alito” Moreno y por pedirle solamente una mayor apertura incluso en el partido, les ha quedado claro que quien lo dirige no está dispuesto a ceder el poder ni permitir que otros grupos distintos al suyo controlen la vida y los órganos internos del partido, con lo que los orilla a buscar otro tipo de métodos para tratar de resolver la crisis interna que vive el partido tricolor tras las estridentes derrotas que han sufrido en 20 de las 21 elecciones estatales que han enfrentado en los últimos 3 años, durante la actual dirigencia nacional partidista.
El problema para el PRI es que, en medio del desgaste al que se encuentra expuesto el actual dirigente nacional priista, las definiciones políticas que tendrán que tomarse en los próximos meses resultan, literalmente de vida o muerte para el partido. Por ejemplo, la decisión de quién será la candidata o candidato de la alianza “Va por México” a la gubernatura del Estado de México resulta vital para el priismo.
La suerte de la coalición opositora quedará ligada inevitablemente a la forma en que se resuelva la candidatura compartida por el PRI, PAN y PRD para el Estado de México. Se trata de una definición atravesada por la crisis que ahora afecta a la dirigencia nacional priista de “Alito” Moreno, y cuyas posibles soluciones estarán determinadas por los arreglos o desarreglos que él consiga con los mexiquenses de su partido y los del PAN.
El panorama ha comenzado a complicarse para una coalición que en esa entidad tiene tres aspirantes con atributos diversos para disputar la joya de la corona electoral, en junio de 2023, pieza determinante para una oposición que podría darse por muerta, si pierde en esta antesala de la competencia presidencial de 2024.
Es cierto que Coahuila es un escenario relativamente cómodo para la alianza “Va por México” porque el gobernador priista Miguel Riquelme ya dejó en claro que no canjeará su militancia por una embajada, y los resultados de hace tres domingos en Durango mostraron que en esta región del país hay segmentos ciudadanos suspicaces a Morena.
El caso mexiquense, sin embargo, se encuentra enredado a la doble incertidumbre de qué tanto aguantará “Alito” Moreno el embate de los suyos y cómo procederá el gobernador Alfredo del Mazo Maza, cercanísimo al expresidente Enrique Peña Nieto y representante de la principal estirpe priista, la del hoy disminuido “Grupo Atlacomulco”.
Por lo pronto, es sabido que Alfredo del Mazo impulsa a su secretaria de Desarrollo Social, Alejandra del Moral, antes dirigente del PRI estatal, exdiputada federal y exalcaldesa.
También ha trascendido que a “Alito” Moreno no le convence la delfina del gobernador, lo que podría abrirle el camino a Ana Lilia Herrera, exsecretaria estatal, exsenadora, exalcaldesa y actual diputada federal. Pero también a Enrique Vargas del Villar, jefe de la bancada panista en la entidad, exalcalde y uno de los aliados más importantes de Marko Cortés y su fiel escudero Santiago Creel.
La lección de Hidalgo, en cambio, pesa sobre los priistas: no se debe impulsar una candidatura ajena a los afectos del mandatario estatal.
El gran reto para la oposición es que se mantenga cohesionada en tiempos en que al interior del PRI y el PAN se están presentando rudos debates que los van llevando a confrontaciones y cuestionamientos, el tema pasa por sus liderazgos.
Las declaraciones de “Alito” Moreno en el sentido de que se armen las familias para defenderse lo que han provocado es que tanto el PRD como el PAN se deslinden y tomen distancia; las armas las carga el diablo y son por principio un riesgo.
Allí están Alfredo del Mazo y Miguel Ángel Riquelme, gobernadores tricolores, quienes además de tener bajo su protección a la estructura partidista en sus estados, mantienen el control político sobre los precandidatos que buscan abanderar la causa rumbo a la elección para gobernador en 2023.
En la entidad mexiquense como en Coahuila nada se mueve en el PRI si no es con la venía de los gobernadores. Por lo tanto, son ellos los auténticos fieles de la balanza para elegir al candidato, así como para sellar la alianza electoral con el PAN, PRD y otros partidos políticos.
Prácticamente, en un empate de agendas, PRI y Morena llevaron a cabo sus masivas concentraciones de simpatizantes para mostrar lo que llama músculo partidista para posicionar la marca y entrelíneas iniciar los trabajos que tiene como meta el proceso del 2023.
En el mitin morenista en Coahuila, se dio a conocer que los contendientes en busca de la candidatura son cuatro: el senador Armando Guadiana Tijerina —el viejo del sombrerón— que ya lo fue y muy difícilmente volvería a hacerlo, útil solo para momentos electorales a la baja; el delegado de los programas federales en la entidad Reyes Flores Hurtado más conocido como “Tún—Tun” que fue presidente estatal del PAN; y las dos cartas realmente de competencia interna, Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de seguridad pública federal y protección ciudadana, que llegó al cargo con Alfonso Durazo y ha seguido con Rosa Icela Rodríguez, y entre algo más que cejas alzadas de militantes morenitas, Luis Fernando Salazar impulsado por Mario Delgado quien tras 22 años en el PAN, miembro del grupo del expresidente Felipe Calderón y su llegada fraudulenta al poder y sus políticas, votante del “Pacto por México” de Enrique Peña Nieto, y diputado federal a nombre del PAN en 2018, que luego pasó con menos demencia pero al estilo desertor del interés a la bancada de Morena de San Lázaro.
Además, que en la conferencia “mañanera” de hace unos días, un reportero del medio “Elefante Blanco Mx” le pregunto al presidente López Obrador su opinión del reportaje “Operación Jaiba Brava”, en el que se exhibe la entrega de más de 50 millones de pesos provenientes del gobierno de Tamaulipas a “Grupo Orlegi”, a través del equipo de futbol “TM Futbol Club”, esto, por la relación personal —y muy cerca— que tiene Luis Fernando Salazar con el propio gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, quien le ayudo a realizar dicha operación junto con Luis Miguel Pérez, persona de confianza del empresario Alejandro Irarragorri, lo que ha generado reacciones de los protagonistas del entramado deportivo, político y empresarial.
Sin omitir, que el presidente de “Grupo Orlegi”, también es dueño de los equipos de futbol “Club Santos Laguna”, “Atlas Fútbol Club”, “Tampico Madero Fútbol Club” y quien fue dueño del “TM Futbol Club”
“Elefante Blanco Mx” reveló la relación comercial pactada por el empresario Alejandro Irarragorri, presidente de “Grupo Orlegi” y el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca. Los documentos oficiales demuestran la operación entre dependencias que comenzó el 22 de junio de 2017.
En la estrategia participaron los exsecretarios de Bienestar Social, Gerardo Peña Flores; de Desarrollo Económico, Carlos Talancón Ostos; y de Educación, Héctor Escobar Salazar; el director del deporte,
Carlos Fernández Altamirano; el coordinador de comunicación, Francisco García Juárez; y el actual titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Gilberto Estrella Hernández.
La información financiera exhibió que los registros de la Secretaría de Finanzas, encargada de administrar el presupuesto, reportó 55,487,919 pesos en depósitos a “TM Futbol Club” que llegaron a las arcas de “Grupo Orlegi”. Esta cantidad es menor por 8,238,920 pesos, de acuerdo a los montos que se firmaron en los contratos entregados por la Secretaría de Administración.
Los pagos de entre 6,000,000 pesos y 9,000,000 pesos se dieron por adjudicaciones directas, hecho que violó los límites establecidos en el Presupuesto de Egresos, que marcó un máximo de 800,000 pesos para este tipo de contratación.
En la trama también participaron los directores de la Secretaría de Administración: Román Castillo Airola, amigo de la familia Cabeza de Vaca; y Horacio Ortiz Ornelas, hijo de Horacio Ortiz Renán, presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo de la Judicatura del Estado de Tamaulipas.
La cantidad millonaria que recibió “Grupo Orlegi” tomó mayor relevancia al anunciar la desaparición del “TM Futbol Club”, decisión que argumentaron por motivos financieros y de infraestructura del estadio. Sin embargo, la Sección Uno del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), propietario del inmueble, reveló que no cobró renta y que las ganancias por bebidas y alimentos fueron íntegras al consorcio empresarial.
La “Operación Jaiba Brava” fue tema de discusión en el Congreso de Tamaulipas. El diputado de Morena, Ovidio García García, presentó un punto de acuerdo para que la Contraloría gubernamental y la Fiscalía General de Justicia investiguen el caso y presenten denuncias contra los funcionarios involucrados en la contratación de servicios de promoción del gobierno de Tamaulipas en ámbitos de turismo, deporte, ecología y utilizar a los jugadores para las necesidades requeridas por la administración cabecista.
Además, en el municipio de Fco. I. Madero más conocido como el famoso “Chávez” de La Laguna, que debutó políticamente a nivel nacional por reunir a las “corcholatas” y celebridades más reconocidas de Morena, con la excepción de Marcelo Ebrad, se repitió el evento del 12 de junio en Toluca.
Ahí se les informó que en relación a la convocatoria para elegir a quien encabece a los “Comités de Defensa” de la “4T”, primero se elegirá candidato morenista en tierras mexiquenses para después definir al abanderado de Coahuila, lo que provocó un brillo en los ojos, sobre todo en los hombres, que veían como un dolor de cabeza el término constitucional de la “paridad de género”, pues muchos ya ven muy activo al subsecretario de seguridad pública federal y protección ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, lo que en sus cálculos favorecía a una mujer en el Estado de México.
Un día antes, en el evento del PRI denominado “SUMAMOS” en el Parque Maravillas en Saltillo, ante miles de simpatizantes, los priistas no resistieron la presión de Morena y adelantaron los trabajos con miras el proceso del 2023. El gobernador Miguel Ángel Riquelme, sentenció en su mensaje: “le vamos a ganar al partido de la corcholatas”.
Por fin, el alcalde de Torreón Román Alberto Cepeda se puso camisa blanca y no desentono con el resto de la militancia, como es su costumbre.
La escena del discurso del gobernador Miguel Ángel Riquelme evidenció la falta de respeto de quienes lo acompañaron al evento tricolor, pues mientras dirigía su mensaje —de manera enérgica— sobre porque el PRI es la alternativa política, detrás de él, se apreciaron como sus colaboradores —más cercanos— estaban bromeando, mofándose, revisando celulares, de plano, hubo uno que se levantó del asiento. Si esto sucede, apenas que fue el arranque oficial del priismo coahuilense, ¿qué se puede esperar en los próximos meses?
También, cabe mencionar que Shamir Fernández le brindó buen lugar a Felipe Eduardo González, lo sentó a su lado en el evento del PRI. Todos saben que Shamir ha respaldado a Felipe en los últimos 10 años de su carrera política, pero la pregunta es la siguiente, ¿qué sigue para Felipe González? ¿ser diputado? ¿ser presidente del PRI de Torreón?…
Todo pende de un hilo, de lo que pueda suceder el próximo 04 de julio en la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
La elección para renovar la gubernatura de Coahuila será justo dentro de 11 meses, pero la convocatoria para esos comicios deberá ser publicada a más tardar dentro de 50 días. Por eso, la Secretaría General de acuerdos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación incorporó a la lista oficial de asuntos a resolver para la próxima semana la acción de inconstitucionalidad 28/2022 y su acumulada 36/2022.
La ministra, Loretta Ortiz Ahlf, en cumplimiento de los criterios de máxima publicidad del Alto Tribunal, socializó su proyecto de sentencia en el juicio interpuesto por los representantes legales del PVEM y la Unión Democrática de Coahuila, partidos aliados de Morena, para reclamar la invalidez del decreto 193 que reformó la Constitución de Coahuila para incorporar la “paridad de género” en la postulación a cargos de elección popular.
La LXII Legislatura de Coahuila entró en funciones en enero del 2021. De los 25 diputados locales, 16 son priistas, cuatro morenistas, tres panistas, una pevemista y otra, de la UCD. La mayoría —leal al gobernador Miguel Ángel Riquelme— hizo un peculiar ejercicio de su libertad de configuración para adecuar la legislación con la reforma constitucional federal que procuró la “paridad total” desde el 2019.
Hace tres meses fue la reforma en Coahuila, materializada en el decreto 193 y en la Carta de los Derechos Políticos. El modelo de “paridad de género” aprobado por la mayoría entraría en vigor hasta el 2029. “En ningún caso, la paridad aplicará en forma retroactiva para el proceso electoral 2023, en perjuicio de cualquier género”, suscribieron los legisladores, “el género de la persona que tome posesión en el 2023 condicionará el género de las postulaciones del proceso electoral posterior”.
La propuesta de Loretta Ortiz Ahlf se conoció en la víspera de la sesión plenaria del Tribunal Superior de Justicia de Coahuila, que fuera del orden del día, desahogó una queja —tramitada por Morena— porque los cabildos de los 38 ayuntamientos de la entidad no habían dado su aval y dejó sin efectos el decreto 193. Los diputados coahuilenses tuvieron sesión ordinaria, fueron notificados del fallo, que entre sus resolutivos mandata al pleno a sesionar para cumplir con la sentencia, dentro de las 24 horas siguientes. El presidente de la Junta de Gobierno, Lalo Olmos, adelantó que podrían admitir una nueva iniciativa.
En ese caso, la acción de inconstitucionalidad quedaría sin materia, y el PRI podría seguir con su estrategia: asegurar que la nominación en el Estado de México recaiga en una mujer y que, en consecuencia, la “paridad de género” compense en Coahuila. En caso contrario, ni siquiera hay un “Plan B”. Morena y sus aliados están pendientes de esta definición, por las implicaciones que tendría en la definición de las candidaturas.
El asunto sigue en la lista de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y también entre los pendientes del INE, donde circuló un proyecto elaborado por la Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos que mandata a los partidos a definir dónde postularán a una mujer en las elecciones para las gubernaturas del 2023 a más tardar 30 días antes del inicio de su proceso interno de selección de candidatos.
Supongamos, solo para hacer un ejercicio, que el partido en el gobierno, Morena, ya decidió que “la encuesta” para Coahuila la ganará el subsecretario de seguridad pública federal y protección ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, que está en plena campaña. Si es así, para el Estado de México tiene forzosamente que ir una mujer, que sería la maestra Delfina Gómez.
Si Morena, para seguir con el ejemplo, resuelve poner como candidato en el Estado de México a un varón, el sacrificado sería el propio Ricardo Mejía en Coahuila. La baraja se reduce, solo quedaría elegir entre la alcaldesa de Muzquiz, Tania Flores Guerra, y la diputada local, Lizbeth Ogazón Nava, nos cuentan, que la primera llevaría mano.
Sin duda, esto sacudiría todo el escenario político —actual— en territorio coahuilense, la alianza “Va por Coahuila” estaría en riesgo… “Es el tiempo de las Mujeres”
Lo que dice “Alito” Moreno sobre la posesión de armas de fuego es abominable, pero en la vida real no importa. En este país con leyes de armas tan restrictivas, el que quiera tener una puede conseguirla muy fácilmente.
Todavía no se sabe si “Alito” Moreno consultó la propuesta con los legisladores de su partido, con los dirigentes de los partidos aliados, o se limitó a preguntarle al espejo y consideró que era una idea muy ingeniosa o tal vez sugerida por Rubén Moreira.
El tema no es un asunto menor en esta región, recordemos el incidente sucedido en el Colegio Cervantes de Torreón, propiedad del director del Instituto Municipal de Cultura y Educación, Antonio Méndez Vigatá, donde un niño de 11 años causó una masacre: asesino a su maestra, hirió otros compañeros y después se suicidó. El menor, que vivía con su abuela, ingresó al plantel con dos armas… A caso ¿esa es la estrategia que “Alito” Moreno y su partido ofrecen a las familias mexicanas para solucionar la inseguridad del país?
Luego de advertir que nueve expresidentes del tricolor piden su renuncia como dirigente nacional del PRI, “Alito” Moreno, se defiende y, dice, que si quieren dividir a su partido y a la alianza “Va por México”, se “van a topar con un muro”, agregó, que está enfocado en dos frentes de su batalla, uno interno en Coahuila y el otro externó, en la Ciudad de México.
Con el cobijo del gobernador Miguel Ángel Riquelme, retó desde Coahuila a las “corcholatas” presidenciales de Morena, al tiempo que sus abogados en la capital del país intensificaron la búsqueda de un juez que esté dispuesto a brindarle la defensa del Estado Mexicano. Nos comentan, que ya va para un mes que el exgobernador de Campeche solicitó un amparo para evitar la publicación de más audios en el programa “la hora del jaguar” de la gobernadora Layda Sansores, pero es día que no le han aceptado su caso.
El partido Movimiento Ciudadano volvió a confirmar su rotundo no, a la idea de sumarse a la alianza “Va por México”, pues lo que se alcanza a visualizar, dicen, es apenas la punta del iceberg de lo que se viene en contra del PRI, PAN y PRD. ¿Será?
Mientras tanto en Torreón, el alcalde Román Alberto Cepeda presume en las diferentes páginas de Facebook que administran sus familiares directos, “la encuesta” que se inventó, donde sale posicionado en el primer lugar de las preferencia electorales de Coahuila, incluso, por encima de Manolo Jiménez.
Al ser cuestionado por los medios de comunicación, aseguró que personalmente no ha solicitado realizar ninguna encuesta para evaluar sus posibilidades rumbo a la elección de la candidatura al Gobierno de Coahuila en 2023, señaló, que pese a que "aspiraciones hay" respecto a ser considerado por su partido como candidato, dijo, que por el momento se encuentra enfocado en su labor como presidente municipal, encomienda desde la que tiene que resolver diversos pendientes y retos, especialmente los relacionados con la seguridad pública, la mejora en los servicios públicos y la promoción de Torreón como destino atractivo a las inversiones de todo tipo.
Cabe recordar que desde el año pasado se han generado declaraciones e informaciones respecto a quienes podrían ser considerados para la candidatura del PRI rumbo a la elección del Gobierno de Coahuila en 2023, entre los perfiles que sí han admitido su interés están el propio Román Alberto Cepeda; el diputado federal, Jericó Abramo Masso; el secretario de Inclusión y Desarrollo Social, Manolo Jiménez; así como la senadora por Coahuila, Verónica Martínez, quien ya se prepara para recibir el respaldo de la militancia priista, al grito de ¡Gobernadora!, por aquello, que la Suprema Corte de Justicia de la Nación confirme la “paridad de género” en el proceso del 2023 de Coahuila.
En otro tema, Torreón iniciará su Plan Hídrico con 257 millones de pesos autorizados del programa de eficiencias que impulsa la Comisión Nacional del Agua a través del proyecto de “Agua Saludable para La Laguna” y que tiene como finalidad aprovechar al máximo la eficiencia del organismos paramunicipal torreonense. Incluyen, la elaboración del Plan de Desarrollo Integral del SIMAS Torreón, inversión en líneas de conducción en diferentes colonias, diagnóstico de eficiencias electromecánicas, sustitución de equipos de bombeo, instalación de micromedidores, entre otros… Nos leemos en la próxima… ¡no olvides compartirla!