POR: EL TRINO
EN ESTOS DIAS, está iniciando la calienta de la cosecha del melón y la sandía, y ante la llegada al mercado el volumen más grande de estos frutos de nueva cuenta vemos como los productores están siendo amenazados por los compradores intermediarios cariñosamente conocidos como “coyotes”, los cuales buscarán, como siempre, comprar su producción al precio más bajo que sea posible, y en esta lucha de los productores y coyotes los campesinos prácticamente están siendo abandonados por el gobierno federal y los únicos que tratan de apoyar en algo para regular el precio son los empleados de Fomento agropecuario estatal, que todos los días buscan que el precio no se desplome. La temporada fuerte de la cosecha de melón ya empezó, y a ver cómo les va a los campesinos.
En el municipio de San Pedro se sembraron este año más de 500 hectáreas de melón y un poco más de 250 de melón, somos el segundo municipio en la comarca Lagunera de Coahuila con superficie de huerta sembrada. El año pasado, se sembró casi el doble que se estableció este año, y así les fue a los productores que prácticamente todos los que sembraron con agua del rio Nazas tuvieron pérdidas. Ojalá, este año no pase lo mismo y el mercado se mantenga con precios aceptables.
También estos años estamos viendo el terrible desprecio que siente por los campesinos Laguneros el titular del ejecutivo federal. En este momento no hay absolutamente ningún apoyo por parte del gobierno federal para los productores del sector social de la comarca Lagunera. No hay una sola medida o estrategia fijada por el gobierno federal para apoyar a los productores agrícolas o ganaderos de la región. Cada que inicia el ciclo agrícola los campesinos se acuerdan que el presidente López Obrador les prometió a lo largo de su campaña de 18 años que los iba a apoyar. Es más, en su cierre de campaña en San Pedro de las colonias cuando ya era inminente su triunfo electoral, les prometió a los campesinos de San Pedro dos apoyos al año, crédito a la palabra hasta por 40 mil pesos por hectárea a los productores de algodón y apoyo para los ganaderos, a quienes dijo que les compraría la leche a 8 pesos con 30 centavos el litro, y aquella masa de campesinos y chiveros hartos de la corrupción y los excesos de los gobiernos priistas y panistas le entregaron su voto, y que pasó. A partir del primero de diciembre del 2018, se canceló el PROCAMPO y también el PROGAN, y se cancelaron los seguros catastróficos y todos los programas que poco o mucho servían a los productores del mentado sector social, entre ellos, el de equipamiento agrícola y el de apoyo para adquirir pies de crías.
La justificación para cancelarlo todo fue que porque había mucha corrupción y porque los apoyos eran desviados para solo unos cuantos, y hasta hoy es fecha que no se ha presentado una denuncia contra ningún presunto pillo y tampoco se ha iniciado una investigación por esos presuntos desvíos. Como en el caso del aeropuerto de Texcoco, se habló de corrupción pero nunca se demostró ni se encarceló a nadie, y los recursos que antes se daban en la Laguna se fueron al sureste del país y a los programas asistenciales que hoy como antes están siendo usados para comprar votos para el partido del que es dueño el presidente. López Obrador, al final de cuentas, salió más ladino que priistas y panistas porque supo engañar a los campesinos sampetrinos y de la región, supo usar el resentimiento y el hartazgo social para ganar la elección. En nuestro municipio, hay una gran vocación agrícola y los productores han salido y seguirán saliendo adelante con o sin el apoyo del gobierno de López. Y en este asunto pasa algo particularmente notable. A pesar del abandono al campo el presidente mentiroso y ladino sigue siendo muy popular, al grado que en San Pedro fue donde más votos tuvieron en la consulta de la revocación del mandato. Sin duda, algo de masoquistas tenemos los TRINOS…