Un anciano de 80 años acude a la consulta del médico donde le recomiendan realizarse un análisis de esperma. El médico, le entrega al paciente un pequeño frasco y le dice que lo traiga lleno para proceder a su análisis.
Al día siguiente, el anciano regresa a la consulta con el frasco vacío. El doctor le pregunta:
¿Cómo es que usted me trae el frasco vacío?
Verá Doctor. Lo he intentado con la mano derecha, y no he tenido éxito. Después lo intenté con la mano izquierda, y tampoco. Entonces, le pedí ayuda a mi esposa, que también lo intentó con la mano derecha y con la mano izquierda sin llegar a conseguir nada. Luego probó con la boca y tampoco. Entonces, se nos ocurrió pedir ayuda a la vecina, que es mucho más joven que mi mujer…
El doctor interrumpe al paciente y le pregunta:
¿Usted llegó a pedirle ayuda a la vecina?
Sí, doctor. Lo hemos intentado todo, y no hay manera de abrir el frasco.