Matamoros, Coahuila.-
Sigue la cuenta regresiva para el pseudo presidente Lacho (ra) Piña, quien ya no ve lo duro sino lo tupido, se le hace eterno el no finalizar ya la administración que, juró y perjuró, sería la esperanza de Coahuila.
Caguamas, ejotito, inútil, (ra) Piña, pseudo presidente, motes que se ha ganado a pulso en estos tres años en los que ha dejado un desastre en Matamoros, a 3 meses de concluir ha sido el gran ausente.
Las quejas ciudadanas fueron las mismas durante este trienio de desmandato y aunque los habitantes llamaban a gritos que se solucionaran, no fue así, empeoraron cada día.
Hoy, se tiene un grave problema en drenaje en todas las colonias, como prueba basta el botón en las Vegas de Marrufo, donde se están haciendo pen...itentes porque no dan solución mínima a la queja de los vecinos, quienes ya no aguantan los fétidos olores, los mosquitos, insectos y ya hasta se habla de casos de dengue entre las familias.
Agrégale carreteras intransitables como la del ejido Flor de Mayo, las aledañas a Coyote, Solima, Vizcaya y párale de contar.
Servicios públicos, programas sociales, y ni se diga en los adeudos propios del municipio, contrató créditos a largo plazo que pagarán las próximas administraciones con los impuestos que generan los ciudadanos, esto en complicidad de los regidores que, por lugares de trabajo o tarjetas de nómina, permitieron que hicieran de Matamoros, un completo asco.
En seguridad pública, muchas quejas sobre complicidad que tienen los mandos policiacos con los amantes de lo ajeno, al momento que los ciudadanos detenían por sus propios medios a los delincuentes, eran entregados a los elementos policiacos, pero no los remitían a las celdas, no se sabe a ciencia cierta si eran cómplices o los mismos polis les robaban a su vez las cosas a ellos.
No hay ningún director o jefe de departamento, que haya hecho trabajo de servir a los ciudadanos, cada quien vio por su interés propio y por generar riquezas amansadas del erario público.
Y no conforme con eso, ahora están saqueando todo lo que puedan llevarse en cada dirección municipal y están haciendo magia para poder entregar lo que quede, que la mayoría es inservible.
La presidencia Municipal, para la banda de Horacio (ra) Piña y sus allegados, ha sido una mina de oro que lejos de poder hacer algo por Matamoros, terminaron de darle el tiro de gracia.
No pocos directores o jefes de departamento, se jactan en sus redes sociales que aman a Matamoros, pero no es así, porque en la realidad el daño que le hicieron es mucho.
La esperanza y la transformación se terminó con el caguamas, que ingresó por un partido y cambió 3 o 4 ocasiones de color, junto con sus gatos que no tienen llenadera, fue tanta la desesperación, que hicieron alianzas pero ni así les resultó ante la gente y ciudadanos hartos de la falsa esperanza.
Ante un presupuesto de 900 millones de pesos, no pudo hacer ni una sola obra que beneficiara a los ciudadanos, ni una carretera, absolutamente nada.
El ejotito, dijo en una reciente entrevista, que al terminar su administración se dedicará a su consultorio y a su profesión de quiropráctico y sobandero, pero alguien sabe si dentro del Cereso,¿pueda ejercer?
Lo cierto es que mientras son peras o manzanas, el alcalde entrante Miguel Ángel Ramírez López, deberá poner el dedo en la herida y olvidarse de que todo se arregla con discursos políticos, porque el denunciar desfalcos e irregularidades lo hace aplicar la ley, pero, el guardar silencio lo convierte en cómplice.
Ya lo dijo el finadito Fidencio Treviño, de ese pelo están las cosas allá por Matamoros de los ojetes, digo, ejotes.
