POR: ABEL ALCALÁ H.
La laguna de Coahuila y de Durango, conocida también como la Comarca Lagunera, que en otras épocas no lejanas llegó a tener fama mundial por la fortaleza de sus habitantes para obtener de la tierra buenos y cuantiosos productos que recorrieron la mayor parte del planeta como fue el caso de la vid, la fibra y aceite del algodón, ahora enfrenta el reto de su reinvención.
Veamos algunos conceptos del término reinvención; “Rehacer completamente su vida una persona, en especial en el ámbito laboral”; “la reinvención es y tiene lugar cuando una persona ha de enfrentarse a un cambio importante en su vida o su entorno, negativo o positivo, que suele ocurrir de forma inesperada; la reinvención, pues, parece apurada por un elemento externo que impulsa el cambio”.
Toda persona como toda comunidad de personas están en relación al tiempo y al espacio, en otras palabras, la vida del hombre individual y en sociedad se realiza en una época y en un lugar, es decir, en determinadas circunstancias.
Las circunstancias son esos factores externos que determinan nuestros escenarios sociales, también conforman nuestra identidad. No obstante, estamos obligados a tomar adecuadas decisiones para no perder nunca nuestro control sobre ellas.
Así planteaba José Ortega y Gasset -1883 a 1955- el tema que nos ocupa que resumía con la frase: “Yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo”.
Con la frase Ortega “insiste en lo que está en torno al hombre, todo lo que lo rodea, no solo lo inmediato, sino lo remoto; no solo lo físico, sino lo histórico, lo espiritual, vivir es tratar con el mundo, dirigirse a él, actuar en él, ocuparse de él. En otros términos, la realidad circundante forma la otra mitad de mi persona”.
Haciendo una analogía con la vocación de la persona La Laguna o Comarca Lagunera tenía su vocación para la agricultura la que le dio el mote de “La tierra del oro blanco” refiriéndose a las grandes cosechas del algodón y en menor escala, pero no menos importante, cosechas de vid y trigo.
Al cambiar las circunstancias a favor de la cuenca lechera cambiaron las actividades de los laguneros para adaptarse a las demandas de insumos y servicios de la explotación de la industria de los lácteos.
Luego llegaron empresas industriales, comerciales y de servicios y con ellas la necesidad de la formación universitaria y tecnológica, atrayendo migración a la región lo que detonó la industria de la construcción y la necesidad de un sistema de bancario e hipotecario para facilitar las operaciones financieras y crediticias.
Toda bonanza siempre pasa una factura, que se refleja en el cambio de circunstancias favorables a circunstancias negativas como las siguientes: escases de agua y la existente no es de buena calidad para el consumo humano, aumenta la contaminación de la tierra y el aire, hay sobreoferta de profesionistas y técnicos, aumenta el desempleo y subempleo, los servicios públicos no satisfacen la demanda de la población, etc.
Si los laguneros tenemos la sabiduría, la prudencia, la ciencia, la inteligencia, el amor, la honestidad y la entrega por la región y aprovechamos los nuevos conocimientos y tecnologías para reinventarnos como personas y trabajamos unidos en comunidad pronto camineros hacia el progreso y el esplendor de La Laguna.
Es necesario reinventar la educación en todos sus niveles para adecuarla al Bien Común, al respeto de la dignidad de la persona, a la paz social y a la justicia.
Es indispensable el cambio de paradigmas y superar inercias nocivas, lo cual lograremos con la virtud de la fortaleza y el espíritu emprendedor (empresarial) que están en todos y cada uno de los laguneros. Estimado lector usted dice la última palabra.
