El miedo no anda en burro, dice el dicho popular. Y esto aplica para los miembros de la administración municipal de Matamoros, donde desgobierna Horacio (ra)Piña.
Y es que hace unas semanas, el grupo de ediles que interpusieron ante la Contraloría del Estado una auditoría y, ante la Fiscalía General Anticorrupción, una demanda y una denuncia para que la administración Municipal sea auditada a fondo e investigada por presuntos actos de corrupción. Resulta, que en vez de que los funcionarios requeridos por la Contraloría para que proporcionaran un listado de información para iniciar la auditoría y la investigación, decidieron interponer un amparo, en vez de facilitar las cosas, creyendo que con esa acción, se van a librar de que salga a la luz, todas las trapacerías, las transas y el desvío de recursos públicos y el saqueo que han hecho, en el tiempo que llevan gobernando.
Los 11 regidores que están en contra de (ra)Piña, dijeron que el proceso seguirá hasta donde tope.
El regidor Gonzalo Barrios, dijo que el Secretario del Ayuntamiento, Francisco Salvador Vega, les pidió hacer las paces para llegar a un acuerdo. Sin embargo dijo, que esto va a llegar hasta las últimas consecuencias, pues no han informado de sobre los ingresos por la venta de cerveza ni hay registros en la Tesorería, pues son, alrededor de 100 mil pesos mensuales.
Así qué, ni el Alcalde Horacio (ra)Piña, ni el tesorero, Gerardo Marenres, ni el Secretario del Ayuntamiento, Salvador Vega de León, ni el director de ingreos, se van a salvar y tendrán que pagar.