POR: EL PROFE
Pero, antes que nada, empezaremos esta columna con nuestra típica y tradicional adivinanza que, en esta ocasión, nos fue enviada desde la cuarentena por el mismísimo Iván, “El nalgón”, que en esta semana se convirtió en el particular número cuatro, solo por debajo de su compadre. ¿Cuál es el miembro del comité ejecutivo de la sección 35, al cual se le conoce como el 4T? Como siempre, les daremos algunas pistas: Este personaje con apariencia de “Jenrruchito”, es uno de los coordinadores de gran peso en la sección, quien no se quiso quedar atrás del estilo y peso de su titular, ya que no solo le dio consejos de jale, sino también a nunca dar paso sin huarache, sin gordas, sin papas, chescos y más para el estrés, lo que aplicado a la perfección este personaje llegando al punto donde ya no caben los dos en la misma oficina. Debido a esto, se le cambio de nombre a esta secretaría, a su coordinador y titular, por el de la 4T: cuatro de adobada, cuatro de buche, cuatro de trompo, cuatro de carnitas. Si con todas estas pistas no identifica de quien estamos hablando, pregúntele al “Gordo Limón”, por sus amigos los exquisitos “Payo-especial”, de técnicas.
Entrando en materia político-sindical, complicado fue el cierre de actividades laborales para el magisterio nacional y lagunero, debido a las difíciles condiciones de trabajo que los maestros tuvieron que afrontar con esta nueva realidad que ha llegado para quedarse con el Covid-19 y que ya no tiene para cuando terminarse. Sin lugar a dudas, este cierre tan atípico fue tomado con responsabilidad y compromiso, ya que se cumplieron a cabalidad todas las actividades y métodos que implementaron profesionalmente para cumplir con el servicio educativo que fueron dictados por la Secretaria de Educación.
En este mismo sentido, fueron muy oportunos las felicitaciones y el reconocimiento que el secretario general de la sección 35, el maestro Mora de la Garza, realizara a través de las diferentes redes sociales a todo el gremio magisterial por el término del presente ciclo escolar, mismo que fue secundado por la estructura magisterial y por alguno que otro oportunista.
Sin lugar a dudas, la gran incógnita será de qué manera se iniciará el nuevo ciclo escolar, aunque lo más probable es no sea de manera presencial, porque si en algo han coincidido los diferentes órdenes de gobierno, es en que lo último que volverá a la normalidad serán las clases en el aula. Por tal motivo, los retos que se deberán afrontar para el arranque del próximo ciclo escolar serán muchos y muy variados en cuestiones de aplicación de protocolos de salud y métodos de enseñanza a distancia, para que los alumnos y maestros, que son los actores principales en el servicio educativo, no sean un factor de riesgo y propagación del temible virus. Máxime, porque hasta la fecha, no se tiene, o no se han dado a conocer, la reglamentación para el arranque de actividades escolares, ni tampoco las condiciones laborales para los maestros, quienes se encuentran pendientes de las determinaciones oficiales y sindicales para la nueva etapa educativa y laboral del magisterio.
Hasta la próxima.