POR: REDACCIÓN
Torreón, Coahuila.-
Trabajadores de la Unidad Médica Familiar (UMF) Número 80 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con sede en esta ciudad, denunciaron ante esta casa editorial el acoso laboral al que son sometidos por parte de la directora de la institución, afirmando que los han mantenido en “condiciones inhumanas” de trabajo durante los últimos meses, derivado de la declaración de la pandemia por la aparición del Covid-19.
Entre las irregularidades denunciadas, los afectados afirman que la falta de medidas de higiene y equipo de protección adecuado han provocado que se presenten varios casos de coronavirus entre el personal de la institución, sin embargo, la titular de la clínica, Armida Arévalo Amador, se sigue negando a tomar las medidas sanitarias necesarias para resguardar tanto a pacientes como a trabajadores.
Entrevistada por Sin Censura, una de las trabajadoras del nosocomio, quien por obvias razones solicitó el anonimato, afirmó: “precisamente hoy (la entrevista se realizó el miércoles 24 de junio), se confirmaron otros tres casos, ya en total tenemos nueve casos positivos de COVID-19 entre el personal laboral”. Lamentablemente, y a pesar de la presencia de contagios entre los trabajadores, señalan que los mantienen laborando en condiciones de hacinamiento y sin el equipo de seguridad necesario para resguardar su salud y la de las pacientes que acuden diariamente a recibir atención médica.
“Nos están encerrando, vilmente (Sin Censura tiene en su poder las fotografías que prueban los dichos de la trabajadora entrevistada), tenemos las pruebas donde nos tienen encerrados e incomunicados, porque dicen que por el personal de enfermería pasaron todos los contagios y a raíz de eso nos tienen encerrados bajo candado, lo que va en contra de nuestros derechos constitucionales”, afirma la entrevistada.
Para tratar de solventar la situación, los trabajadores recurrieron a su representante sindical, donde lejos de encontrar apoyo para resolver las irregularidades, se toparon con que bloquearon su intento por llegar a las instancias correspondientes. “Intentamos enviar un escrito (del cual Sin Censura tiene copia), pero el sindicato lo bloqueó y no llegó a ninguna instancia, así que seguimos en la misma situación”.
En lo que se refiere a equipo de protección, también se encuentran desprotegidos: “los cubre bocas que nos dan son sencillos, nada más a los doctores les dan N95 (uno de los más eficaces en cuanto a protección se refiere), no se sanitiza la clínica, nosotros tenemos que andar limpiando y aseando las áreas, el filtro sanitario se encuentra dentro de la clínica cuando debería estar afuera, y no se respeta la sana distancia, entonces, estamos en una situación de riesgo constante”.
Tal hacinamiento, afirma la enfermera entrevistada, provocó que una enfermera se contagiara y luego ella misma transmitiera el COVID-19 a sus tres hijas. A pesar de lo anterior, “no nos quieren hacer las pruebas bajo el argumento de que no hay, nosotros sabemos que sí hay, pero le dan prioridad a los médicos, cuando hay personal de enfermería que ha tenido contacto con casos positivos”.
Asimismo, afirma que enfermeras que fueron pacientes de COVID-19 y ya regresaron a sus labores fueron destinadas a los filtros sanitarios: “nosotros hemos dicho que ellas no deberían estar en esas áreas, pero la directora y la jefa de enfermeras las obligan a estar ahí a pesar de que se encuentran todavía convalecientes”.
Por todo lo anterior, dice, se encuentran en una situación laboral insostenible, que lejos de solventarse se venido agravando con el paso de las semanas, de tal manera, que están buscando que intervengan autoridades, incluso, a nivel federal: “ya le hicimos llegar una carta a Reyes Flores Hurtado (representante del gobierno federal en Coahuila), para que intervenga, porque no podemos seguir así, el acoso es demasiado, es horrible lo que estamos pasando, porque se la pasan nada mas vigilándonos, y recurrimos al sindicato, pero no pasa nada, en lugar de apoyarnos se ponen de su lado. Estamos desesperados”, concluyó.