POR: ABEL ALCALÁ H.
La inmoralidad con que se está acosando a la mujer hasta el grado de generarle un estado psicológico de total inseguridad y desamparo no obedece a un desbordamiento de pasiones y vicios aislados de algunos individuos, más bien tiene todas las características de ser una confabulación.
Una confabulación es la unión de individuos inmorales con un objetivo claro a lograr y al cual dedican dinero, tiempo, recursos logísticos y acciones concretas para atrapar a sus víctimas y disponer de ellas de las formas perversas que mejor le parezcan.
Históricamente se conoce que la mujer ha padecido de un mal trato y sobajamiento en todo tipo de sociedad, luego encontrar la causa de esa confabulación es empezar a trabajar en la erradicación de ese flagelo moral y social.
Actualmente se busca erradicar el acoso, maltrato, abuso y muerte de la mujer por el camino de castigar con penas más severas a los autores materiales de esas acciones criminales. Y a pesar de tener leyes muy punitivas para esas perversiones, con tristeza vemos que los delitos no disminuyen.
Siempre se ha sabido que para erradicar un acto criminal de la sociedad no basta con atrapar y castigar al autor o autores materiales, es indispensable también atrapar y sancionar al o a los autores intelectuales que son los verdaderos causantes del acoso, abuso y muerte de la mujer, pues son ellos los que delinean todo el plan de conjura contra la mujer.
Este plan de confabulación contra la mujer los soportan en la manipulación mental o control mental y se produce cuando un individuo o grupo de individuos ejerce una toma de control del comportamiento de una persona o de un grupo (hombres y mujeres), utilizando técnicas de persuasión o de sugestión mental, en busca de eliminar las capacidades críticas o de autocrítica de la persona, esto es, su capacidad de juzgar o de rehusar informaciones u órdenes mentales.
Para Carole Fennelly la manipulación de las personas (ambos sexos) se realiza para que voluntariamente realicen actos que normalmente no harían.
Para logar esa manipulación sobre las personas humanas y disponer de su voluntad para que realicen los actos más perversos y criminales crean todo una sofisticada industria cuyo objetivo es cosificar a la mujer (hacen que se olviden de su dignidad humana), es decir, que se vea a la mujer como una cosa que está a disposición del hombre y por otro lado a la mujer hacerla sentir liberada, como dueña de sí misma y sin límites morales y realizada.
Algunos ejemplos de la manipulación y los resultados de esa industria se ven a diario en toda la industria de la pornografía, industria que deja millonarias cantidades a sus perversos dueños a base de usar como cosa y explotar a la mujer.
Igualmente sucede con la industria de la prostitución donde la mujer es objeto de explotación, tratos inhumanos y actos criminales, y por desgracias a la vista de todos los ciudadanos.
Existen otras industrias donde la materia prima es la mujer, que explotan y usan para exacerbar al hombre para que obediente ceda al placer genital a través de la mujer que se le presenta y deje sus dineros en cines, antros y lugares de perversión. Hay otras industrias de igual giro como son las películas, revistas, y medios electrónicos.
Se incluye en la manipulación para controlar mentes de hombres y mujeres los concursos de belleza, así como, de otras partes del cuerpo, con el beneplácito del gran sector de mujeres que se deslumbran con el glamur, los placeres y momentos de esplendor.
La manipulación bombardea las 24 horas a hombres y mujeres, a los hombres para incitarlos a una vida sexual sin límites y sin responsabilidad y a las mujeres tentarlas con una libertad sin moralidad y control.
Sin duda que esta manipulación va en detrimento de la mujer y por desgracia se agrede a mujeres como si fueran cosas para uso sexual. Desenmascaremos y denunciemos a estos manipuladores y cerremos esas industrias de perversión y la mujer volverá a sentirse segura y respetada como lo merece su dignidad humana.
