POR: ABEL ALCALÁ H.
A pesar de la denuncia de López Obrador en sus tres campañas políticas por la presidencia de la república de la existencia de la “Mafia del Poder” y acusarla de los mayores actos de corrupción, de enriquecimiento ilegal, de saqueo y robo del patrimonio nacional, ahora que ya es presidente del país esa “mafia del poder” sigue gozando de total impunidad.
Sabemos que millones de mexicanos confiaron en la palabra de López Obrador, quien se comprometió públicamente a ir contra esa mafia del poder, frenar la corrupción y la impunidad, por lo cual ni dudaron en votar por él.
Ya estamos en el día 87 de su gobierno y los resultados de su compromiso de ir contra la mafia del poder no se ven y en cambio publicita como gran obra las acciones para frenar la corrupción en Pemex, en las guarderías infantiles, atacar el robo de gasolinas en los ductos de Pemex, etc., y lanzar acusaciones sin ton ni son cada mañana en su comparecencia ante los medios de comunicación a cuando mexicano no es de su agrado, ni se humilla ante él y a instituciones que no respaldan su postura.
En verdad todas esas acciones de denostar, acusar sin presentar las pruebas y sin presentar las denuncias ante los ministerios públicos, son una cortina de humo para justificarse ante sus seguidores y simpatizantes y tratar de engañarlos con posturas dignas de una telenovela de cuarta categoría.
Y en sus actuaciones López Obrador; ya se pinta como cómico, como indigenista, como liberal, como neo liberal, como pastor y catequista y muestra la imagen de su protector con la leyenda: “Vete enemigo que Dios está conmigo”.
Mientras sucede lo anterior los integrantes de la mafia del poder siguen impunes, gozando de los bienes mal habidos en provecho propio, de su familia y cómplices.
En tanto otros antimexicanos buscan engrosar las filas de MORENA para obtener inmunidad e impunidad por sus actos criminales en contra de los bienes de la nación, pues ser de MORENA es limpiar tu pasado criminal.
Buscando una explicación a la nula acción del gobierno de López Obrador contra la mafia del poder, que él mismo dijo tener plenamente identificada con nombres y apellidos y también conocer el modus operandi de sus actos ilícitos, nos viene las siguientes hipótesis: Que se tenga una pacto de impunidad con esa mafia del poder o que pertenezca López Obrador y los de la mafia del poder a la misma secta liberal y neoliberal.
Sí existe el pacto de impunidad entre López Obrador y la mafia del poder, ese pacto es previo a la elecciones del 1 de julio de 2018 y explicaría porque tanto circo en los medios de comunicación y cero acción judicial en los ministerios públicos.
Sí López Obrador y los de la mafia del poder son correligionarios, compinches o miembros de la secta de liberales y neoliberales que ha gobernado a México por más de 150 años, se entiende que entre ellos no se pueden acusar, dañar o encarcelar pues están bajo las mismas consignas y siguen los mismos fines.
En ambas hipótesis los de la mafia del poder seguirán gozando de impunidad, de protección y abundantes facilidades para seguir no solo disfrutando la riqueza mal habida sino para seguirla incrementando y teniendo influencia en las decisiones de gobierno.
La posibilidad de romper este círculo vicioso entre el actual gobierno y la mafia del poder es que desde adentro de morena los despistado integrantes, diputados, senadores, gobernadores y demás servidores públicos, despierten y se den cuenta del engaño en que viven y luchen por cumplir al pueblo mexicano con el compromiso de terminar con los pactos de impunidad y disminuir la corrupción en los gobiernos de los tres niveles.