POR: ORLANDO ESPINO
Torreón, Coahuila.-
Alrededor de 200 Integrantes de organizaciones sociales y campesinas de la comarca lagunera se manifestaron a las afueras de las instalaciones de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), exigiendo, principalmente, la destitución de Óscar Gutiérrez Santana, gerente regional de Cuencas Centrales del Norte.
De acuerdo con los campesinos que se dieron cita a las afueras del organismo regulador, existe una corrupción sistémica al interior de la dependencia federal, por lo que exigieron la realización de una auditoría a cargo de la Secretaría de la Función Pública para demostrar el “… presunto enriquecimiento inexplicable de estos funcionarios públicos”.
Asimismo, los manifestantes señalaron que, desde hace décadas, enfrentan “…una grave situación de desabasto del agua para el consumo humano y la producción agrícola, que afecta a la población campesina y urbana de Coahuila y Durango”.
De acuerdo con el pliego petitorio que hicieron llegar a Blanca Jiménez Cisneros, titular de la CONAGUA, los campesinos exigen que se resuelva la situación en que se encuentran los módulos de riego, donde, de acuerdo con los inconformes, se presenta un “…manejo irregular y corrupto en la distribución del agua… controlado por camarillas compuestas por funcionarios de CONAGUA en asociación con grupos caciquiles corruptos”.
Señalaron que además los campesinos han sufrido desde hace tiempo el despojo de tierras y derechos de agua: “Ha sido una constante que el sector social padezca un desmantelamiento de su capacidad productiva, (lo) que ha ocasionado pobreza, desempleo y abandono de este sector de la población, debido al despojo sistemático de nuestros derechos de tierras y aguas, permitido por las propias autoridades en asociación con asambleas prefabricadas a modo para arrebatarnos nuestros derechos”.
No solo eso, pues de acuerdo con los productores, existe un número no determinado de pozos ilegales para extraer el recurso hídrico con la complacencia de la CONAGUA: “Las incontables perforaciones ilegales, sin cambio de uso de suelo y sin estudios de impacto ambiental lesionan a las comunidades en sus derechos de agua y llevado al desbasto hídrico para esas localidades, ocasionado por la empresas ganaderas y lecheras”.
Dicha sobre explotación, que de acuerdo con las declaraciones de los afectados es permitida por la corrupción que impera al interior del organismo regulador, ha generado además problemas de salud importantes para los campesinos y sus familias: “Según información de la propia CONAGUA, se extrae el doble de metros cúbicos de lo que recarga nuestro acuífero, lo que evidencia que se extrae mayor volumen del vital líquido del que se les ha concesionado, principalmente, a los grandes productores. Esta sobreexplotación trae como consecuencia un problema de salud por la contaminación por arsénico que afecta a más de un millón de personas en la región”.
Por lo anterior, los campesinos están exigiendo “… la democratización de las direcciones de los módulos de riego y el control de las bases de usuarios.
“Para la recuperación de los derechos de agua y tierra exigimos la dotación original de agua y el respeto al ciclo normal.
Así como una “…acción para transparentar las operaciones que se llevaron a cabo en transacciones irregulares, por lo que solicitamos acceso a los contratos de arrendamiento, derechos de agua de río y contratos de cesión de pozos de uso agrícola de los ejidos para aclarar las dudas pertinentes respecto a maniobras de compra viciadas de origen”.
De acuerdo con los productores agrícolas, mantendrán su lucha por el tiempo que sea necesario para conseguir lo que consideran un acto de justicia para ellos y sus familias: “…es por nuestro derecho a la vida, y a tener un ambiente libre de arsénico, de contaminantes y para la recuperación productiva del sector social, actividad menguada por años de saqueo y abandono del campo mexicano”.
REUNIÓN DE ESPERANZA
El próximo martes 12 de febrero, los integrantes del colectivo que se manifestó a las afueras de la CONAGUA sostendrá una reunión con Blanca Jiménez Cisneros, directora general del organismo regulador, con quien esperan llegar a un acuerdo para que tome en cuenta el pliego petitorio que ya le hicieron llegar.
Con el cambio en el gobierno federal y la lucha que ha emprendido el presidente Andrés Manuel López Obrador contra la corrupción, los campesinos tienen la esperanza de que finalmente les haga justicia la Revolución. Sin embargo, saben que no será sencillo, y en palabras de Hipólito Pasillas, vocero del movimiento en Gómez Palacio, “…si no hay una respuesta buscaremos otras instancias para seguir en esta lucha, no podemos estar con la cabeza agachada, tenemos que dejarle a nuestros hijos un patrimonio, que es por lo que estamos luchando”.