LÓPEZ OBRADOR, LE DEJÓ UN TIRADERO Y UN PAÍS CONVULSIONADO A SHEINBAUM
Obras mal hechas, sin terminar y sin rentabilidad, que además, siguen recibiendo presupuesto.
Una deuda exagerada (casi el doble que recibió de Peña Nieto, incluyendo lo que va del primer año de la actual presidenta), lo que le deja poco margen de maniobrabilidad.
Territorios controlados por el narco, violencia inagotable y, para colmo, un nuevo delito que está pegando fuerte a ciertos sectores de la sociedad: La extorsión.
El gran problema del Huachicol fiscal, que ha significado, aproximadamente, 180 mil millones de pesos. Una cantidad estratosferica (cerca de 13 FOBAPROAS y 40 estafas maestras e igual número de selgalmex), solo para poner algunas referencias.
Si a esto le agregamos la poca inversión pública y el aumento de los Programas del Bienestar, que para éste año, se contemplan 835 mil 700 millones de pesos, pone al gobierno en un quiebre financiero real.
Y, si la deuda ya es demasiado grande y no hay otras fuentes de ingresos, tendrán que hacer como en Venezuela, atacar los fondos del Banco de México y, ahora sí, el acabose; aunque todavía se pudiera, como en su momento, se hizo en Argentina, tomar de los bancos, el dinero de los ahorradores y el anuncio del nuevo modelo de país: el jefe o la jefa Suprema, o sea, la tiranía, la dictadura o, el modelo socialista del país.
Solo que la presidenta se desmarcara de López Obrador, que iniciara una limpia en todos los aspectos y niveles. Algo que se antoja imposible. Por varias razones:
No rompería nunca con AMLO, porque eso significaría, enfrentar a sus huéstes (no hay que olvidar que la mayoría de los diputados y senadores, fueron impuestos por él; lo mismo sucede con la mayoría de los gobernadores y funcionarios del gabinete y, posiblemente, López, tendría el apoyo de las fuerzas armadas).
Ante éste escenario, no le quedaría más remedio, que aceptar la ayuda de los EEUU, pero eso sería imposible, porque, hay que decirlo, Claudia, se quedó anclada en la ideología de los años 80's, en los tiempos del radicalismo ideológico y político; de sus tiempos de guerrillera del M19, en Colombia y de ser una activista radical universitaria.
Claudia, cree ciegamente en los postulados del Foro de Sao Pablo y, en ese sentido, está encaminado a México.