Antes de que los manifestantes por la democracia del pasado domingo 18, fueran oposición, estaban acostumbrados a que el Presidente de la República saliente, a través del Instituto Federal Electoral IFE, primero y luego el Instituto Nacional Electoral INE, les diera la mano con todo el poder que tenía para que saliera electo el Presidente de la República, que ellos querían para seguir haciendo toda clase de negocios en su beneficio, con el poder público en su favor; no interesándoles o interesándoles muy poco el pueblo.
Así se demostró con el Presidente Vicente Fox, del PAN en favor de quienes quisieron que el entrante primer mandatario fuera Felipe Calderón, también de ese mismo partido; y de que éste le devolviera la Presidencia al PRI, en la persona de Enrique Peña Nieto; quien con la escandalosa corrupción hartó a la ciudadanía.
El 1° de julio de 2018, esa ciudadanía que ya estaba harta y tiene la esperanza de que la Presidencia de la República, haga todo lo posible y necesario para el bienestar del pueblo, votó por Andrés Manuel López Obrador, quien a diferencia de sus antecesores ha traído más beneficios en favor del pueblo olvidado por las llamadas mafias de poder.
A escasos 3 meses y una semana de las elecciones del domingo 2 de junio, en las que se elegirá a la o al sucesor del Presidente Andrés Manuel López Obrador, se renovará el Congreso de la Unión, la Jefatura de la Ciudad de México, su Congreso Local y sus Alcaldías; algunas Gubernaturas, Congresos Locales, Ayuntamientos Municipales, en total más de 19 mil cargos en todo el país por lo que son las más grandes de la historia de México; la oposición está arreciando los ataques al Presidente de la República.
La oposición le exige a AMLO, que saque las manos del proceso electoral porque bien sabe que antes los Presidentes de la República, decidían quien los sucediera; por lo que creen que él decidirá quién quedará en su lugar; es decir, como dice el dicho: “Así como viven juzgan”; negando él que esté entrometido o se vaya a entrometer en este proceso electoral.
AMLO, ya dio muestras de que él no mete las manos en los procesos electorales; como ocurrió en las elecciones intermedias del 6 de junio del 2021, en que su partido MORENA perdió 9 de 16 alcaldías y 35 de 66 diputados locales, en la Ciudad de México; y la mayoría calificada de los Diputados Federales, para reformar la Constitución; respetando la voluntad popular, que es lo que caracteriza la democracia. AMLO, confía en que el gobierno como el suyo siga siendo del pueblo, por el pueblo y para el pueblo.