Cuatro jóvenes recién graduados de prestigiosas universidades (MIT, Harvard, Sorbonne y UNAM) solicitan empleo en New York, en una gigantesca empresa multinacional. Al cabo de unos días los llaman para hacer entrevista con el Director General.
Al llegar, el Director les indica que deberán responder a una única pregunta y que, dependiendo de su respuesta, el candidato podría ser contratado.
El Director les pregunta:
- ¿Cuál es la cosa más rápida del mundo?
El graduado del MIT contesta:
- El pensamiento.
Y el Director le pregunta:
– ¿Por qué?
El graduado del MIT contesta:
- Porque un pensamiento ocurre casi instantáneamente
El Director le indica que le gusta y cree que es una excelente respuesta.
Pasa entonces con el graduado de Harvard, y éste contesta:
- Un parpadeo de ojos.
- ¿Y por qué?
- Porque es tan rápido, que a veces ni sentimos cuando lo hacemos.
El Director se queda encantado.
Luego sigue el turno del graduado de Sorbonne y éste le contesta:
- Señor Director, es la electricidad.
Cuando el Director le pregunta por qué, el de Sorbonne le responde:
- Porque cuando llegamos al interruptor de la luz, con un ligero movimiento podemos prender una luz a 5 kilómetros de distancia.
- Excelente, responde el Director.
Cuando le toca el turno al mexicano de la UNAM, éste le responde:
– Señor Director, la diarrea…
El Director, anonadado, le pregunta:
- ¿Qué dice? ¿Usted está bromeando?
A lo que el mexicano contesta:
- No, señor... eso mismo, la diarrea. Fíjese que anoche tuve una diarrea tan fuerte que, antes de poder pensar, parpadear o encender la luz, ya me había hecho encima.
El Director determinó:
- El empleo es suyo.