POR: REDACCIÓN
Torreón, Coahuila.– Los consumidores laguneros que acuden a realizar sus compras semana a semana a los supermercados, centrales de bastos, tiendas de conveniencia, entre otros, se dan cuenta de una dura y cruel realidad: los precios de la canasta básica suben día con día y mientras los productos se encarecen los sueldos siguen igual y a la gran mayoría le alcanza para cada vez menos cosas.
“Todo está bien caro”, dice para Sin Censura una madre de familia que acudió a hacer sus compras a una reconocida tienda de origen norteamericano ubicada en el bulevar Rodríguez Triana. Dice que le preocupa bastante el alza de precios, pues seguido se pregunta hasta donde va a seguir el castigo a su bolsillo, teniendo en cuenta que en casa tiene dos pequeños hijos que no saben de incrementos ni de inflación.
Y es que de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante el último mes el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), registró un aumento de 0.84 por ciento con respecto al mes inmediato anterior, es decir, en el acumulado durante el mes de junio la inflación se situó en 7.99%, un incremento que en este país pocos, muy pocos bolsillos pueden resistir.
El aumento reportado por el INEGI supone el aumento más alto de precios en los últimos 20 años, pues para encontrar un alza de precios tan elevada en un mismo mes tenemos que remontarnos hasta principios del milenio, en el año 2000.
De acuerdo con los datos proporcionados por el instituto, los productos que más se encarecieron son gasolina y electricidad, y alimentos como la papa y el pollo, refrescos envasados y pan dulce, que forman parte de la canasta básica de los mexicanos.
Pero no todo son malas noticias, pues hay productos como el limón, cebolla, jitomate, chiles, entre otros, que registraron precios a la baja, aunque eso no estuvo el incremento histórico de precios, que registra nada más no nada menos que 19 meses consecutivos de aumento.
Eso preocupa sobremanera a las amas de casa, que acuden a realizar sus compras con el mismo presupuesto, pues los salarios no aumentan tan rápido como los precios, y ven como cada vez les alcanza menos.
Así lo relato para Sin Censura Alejandra, profesionista y madre de dos menores de edad que se dice francamente preocupada por qué cada vez que acude al súper encuentra que los precios siguen aumentando y cada vez es más difícil adquirir los productos a los que estaba acostumbrada. "Tiene semanas que no compro aguacate, algo que nunca faltaba en la despensa" dice para este semanario.
Dice que la verdad los precios si le quitan el sueño, pues a veces se pregunta si con la situación como está podrá seguir cubriendo las necesidades de su familia, "aunque espero nunca llegar a esa situación", añade.
Agrega: "Y luego todavía leí en el periódico que los transportistas quieren subir el pasaje a 17 pesos, lo cual no puede ser por los camiones tan deficientes con que ofrecen el servicio... Eso nos apretaría el bolsillo todavía más, por eso muchos esperamos que no pase".
Por lo pronto, no se espera que la inflación se detenga en el corto plazo, aún con los programas de gobierno y con los cientos de millones de pesos que el gobierno destina a subsidios cómo la gasolina, lo que ha pasado un poco el golpe a los bolsillos, pero solo un poco, siguen siendo millones los que ven como su dinero les rinde cada vez menos.