POR: PEDRO BELMARES O.
Mi pasión por escribir es algo que me ha acompañado siempre; las ganas de escribir.
Eso se lo agradezco tanto a mi maestro, el poder caminar con mis letras, el tener una amiga en la computadora; poder decir con mis dedos de mi mano derecha, todo lo que son mis sentimientos al escribir.
En las noches tengo temores y angustias que muchas veces no me dejan dormir, que al día siguiente todo eso lo escribo y solo así me tranquilizo.
Y al publicarlo en el periódico donde colaboro, lo hago para que la gente se sensibilice con mis escritos.
En el mundo hay tantas cosas malas que pasan y no nos damos cuenta, es ahí donde me pongo a pensar que quizás a nosotros nos falta sensibilizarnos más.
Pero a veces es necesario hacer algo por los demás, y poner nuestro granito de arena, que nuestro corazón nos dice que hacer en el momento.
Mi pasión y mi vocación de escribir son muy grandes, y es que tan solo si una persona cambia su vida, esa es mi mejor recompensa.
Yo quiero seguir escribiendo hasta que sea mi último suspiro, y agradécele al de arriba que me dio el don de escribir.