POR: EL PROFE
Pero, antes que nada, empezaremos esta columna con nuestra típica y tradicional adivinanza, que nos fue enviada por el centro de inteligencia del grupo marrano. ¿Cuál es el miembro del comité ejecutivo de la sección 35, al que se le conoce como el Marranito valiente? Como siempre, les daremos algunas pistas: Este personaje con apariencia de señora menudera, es uno de los traidores que aparece en las reuniones del Fellote, llevando y trayendo chismes, sirviendo churritos, agua cochina de piña que más bien parecen los orines del Cordero, limpiando sillas y haciendo demás chingaderas para quedar bien, lo que ha provocado una serie de críticas, ya que en los lugares donde realizan las reuniones se ve al cara de molcajete sentado a un lado de un asador. Claro, dicho asador es para la foto, ya que a veces ni churritos les lleva. Lamentablemente, la estrategia de estos sinvergüenzas no ha tenido mucho éxito, por lo que se les propone que, para próximas reunioncitas, se promueva que lleven un show donde presente a la Carmela bailando pa´ la raza, y al marranito Orejón presentando su espectáculo de Juan Gabriel; tal vez, así llenen la quinta y sean más atractivas y de interés las reuniones para sus invitados. Si con todas estas pistas no identifica de quién estamos hablando, pregunte por el “Infiltrado” del grupo marrano a las reuniones Fellotas.
Entrando en materia político – sindical, el que no resiste ni la menor prueba del ácido es el gusanito de Abel Aguirre, ya que ante la más mínima exposición en las redes sociales se pulveriza. Y es que, al gusanito de Abel, se le ocurrió la pendeja idea de promoverse en un supuesto sondeo, para ver quién de los candidatos expuestos es el que tiene hasta el momento la mayor aceptación para ser el sucesor en la dirigencia de la sección 35. El gusanito, en el supuesto sondeo, aparece junto algunos de los “aspirinos” adelantados, como el fellote de Cordero, el loquito senil de Adan Baqueiro y Gerardo Alba, el “Papito”, a los cuales les tupieron por todos lados y a unos ni siquiera los pelaron, siendo el gusanito de Abel, al que le dieron semejante madrina al sacarle los trapos al sol y acusarle de innumerables corruptelas, fraudes y hasta de acoso sexual, y otros tantos delitos. Lo más lamentable para él gusanito, es que salpicó a medio mundo, e, inclusive, a los que el gusanito de Abel presume de ser sus padrinos.
En donde si de plano la cajateo toda, fue que quiso aprovecharse de la base de datos que tiene de los trabajadores de la educación que en el último proceso electoral formaron parte de la estructura magisterial priista. Lo anterior, solo le sirvió para su propio perjuicio, por qué fueron precisamente los de esta estructura los que se encargaron, mediante otros contactos no tan conocidos, de destrozarlo en las redes sociales. Desgraciadamente para el gusanito, la ambición y la nula inteligencia, lo llevan a no entender cómo funcionan dichas estructuras político partidistas al interior del sindicato, ya que todas son promovidas de manera institucional desde la dirigencia y logran aglutinar a trabajadores de la educación afines tanto a la institucionalidad sindical como partidista, y ni en los mejores tiempos del Nueva a Alianza de Elba Esther, sirvieron para catapultar a los miembros de dichas estructuras a la dirigencia seccional. De hecho, podemos decir que la actual estructura magisterial priista, en lo que respecta a lograr posiciones políticas gremiales para la sección 35, ha sido por mucho la más pobre. Basta recordar que las dos anteriores, sirvieron para que dos integrantes lograran estar en el Cabildo de Torreón, como lo fue Blanca Maltos y Gerardo Alba.
Este pésimo papel coordinando la estructura magisterial priista, no lo llevará obtener la tan anhelada aceptación que pretende el gusanito de Abel, ya que fue impuesto y designado de manera fortuita, y con el desagrado total de los miembros de esta estructura, a los cuales les tocó participar más de a fuerzas que de ganas. Al gusanito se le olvida que calladito se ve menos hojaldra, ya que, con sus acciones, solo demuestra su total deslealtad al secretario general.
Hasta la próxima…
