Días antes hubo un feminicidio en el ejido San Ignacio, cuatro damas fueron asesinadas por un individuo, la alcaldesa Paty Grado Falcón, llegó a dar el luto, pero solo para “taparle el ojo al macho”, pues unos días posteriores, organizó un baile en conocido centro social, ahí mismo en San Ignacio, fue la Fuerza Coahuila a suspendérselo, aun cuando la boda se siguió llevando a cabo y al parecer cuando se fueron los elementos de esa corporación continúo con la música, sin importarle el luto que había, fue un familiar de la pareja sentimental de la alcaldesa de apellido Godoy, quien contrajo matrimonio.
A la alcaldesa Paty Grado poco le importó el luto que vivía esa familia que perdió a cuatro integrantes, en un crimen que sacudió al Estado en su totalidad, pues se trataba de la boda de una de las nietas de su pareja sentimental de apellido Godoy, entonces el evento social, pese al luto que se vivió en esa comunidad rural, a ella no le importó suspender dicho evento y continuo de manera normal.
Sin embargo cuando la fiesta se celebraba llegaron elementos de Fuerza Coahuila o los GATES, para detener el baile, pues se consideraba que se podrían romper los protocolos de seguridad por el COVID-19, pero no fue así.
La boda se siguió llevando a cabo, sin embargo la autoridad estatal, tomo la decisión de que la música se detuviera, aunque los festejos de la boda continuaran, ya sin la música.
La suspensión del ruido y el baile al parecer solo duro mientras que los elementos de la Seguridad Estatal se encontraban en ese lugar, pues los mismos se fueron y como autoritaria la alcaldesa Paty Grado ordeno que siguiera la música, y dicho evento social se realizó pese al luto que vivía la familia de San Ignacio.