POR: PEDRO BELMARES O.
Me contaron que te vieron y preguntaste por mí. Me dio mucha alegría saber de ti, saber que estás bien.
Pero a la vez me siento orgulloso de haber decidido no saber de ti, y de no buscarte nunca más.
Quiero que sepas que me he sentido mejor conmigo mismo, dejé de sentirme responsable de ti, porque, aunque tú no lo sepas, siempre estuve para ti, y tú nunca tomaste en cuenta mis sentimientos, más aún, lo que yo sentía por ti.
Aprendí a quitarme ese sentimiento de culpa, el pensar que tú siempre me ibas a necesitar, hasta que aprendí a valorarme a mí mismo, y a decir que no necesito a nadie para ser feliz. En mi corazón ya no hallarás nada de ti, solo sombras de recuerdos de un amor que no pudo ser.
Solo espero que alguien se enamore de ti y te haga inmensamente dichosa. No te preocupes por mí, porque, aunque no lo creas, hoy tengo lo suficiente y lo necesario, que es el amor de mi familia.
Hoy solo te pido que busques tu camino, porque en el mío, no estarás tú.
Ni odio ni amor, tan solo los mejores deseos que encuentres a buenas personas, y que siempre mires para el frente, y que nunca te hagan daño, que sepas valorar a las personas que lleguen a tu vida.
Hoy quisiera decirte que ya no necesitas de mi compañía, aprende a volar sola, que nadie y nada te detiene.
Suerte en todo lo que hagas.