AMLO COMENZÓ CON EL PIE IZQUIERDO
López Obrador creyó conocer las entrañas del sistema político mexicano; creyó tener un diagnóstico claro del funcionamiento del Gobierno; creyó que su fuerza moral le alcanzaría para hacer y deshacer sin consecuencias, enfrentar, insultar, descalificar, acusar y denunciar con total impunidad desde la tribuna mañanera, con total impunidad.
Pero no fue así, pues el sistema mexicano es muy complejo, por lo que no solo se requieren discursos para lograr cambios en sus estructuras, mismas que durante muchos años, no solo perduraron, sino que se deformaron y anquilosaron, de tal manera, que se requieren instrumentos viables, actualizados y probados para, de manera paulatina, se vayan demoliendo y, en su lugar, ir construyendo nuevas instituciones y mejores leyes para lograr una verdadera transformación.
AMLO creyó conocer las complejas redes de poder e intereses, que son los que jalan las palancas para frenar o mover al país. Por eso, con su discurso de odio y con sus decisiones cambiantes y a veces fuera de contexto, ha alejado a los hombres del dinero, que son esenciales para mover la palanca de la inversión y, por ende, la creación de empleos y de riqueza. Pero no se ve en horizonte inmediato, que su actitud vaya a cambiar; por el contrario, son estas redes de poder, las que se están encargando de promover la salida anticipada del Presidente.
Y como AMLO es un ignorante del funcionamiento de la economía global y nacional –que no pueden desligarse-, cree que con el raquítico y amañado presupuesto que dio a conocer para el año próximo, va a lograr las transformaciones estructurales que tanto pregona, sin saber, que el crecimiento económico, será de -8% a -12 %, cuando en su locura e ignorancia, promete, cuando menos, un crecimiento de 2.5%.
La Joya de la Corona que había sido PEMEX, hasta hace 12 años, seguirá en caída libre, pues no podrá cumplir con las cuotas que prometió el Presidente, por el contrario, el lastre que se carga, lo tiene a punto de la ruina. Así que, aunque el precio del petróleo subiera –como contempla la Ley de Ingresos-, a 47 o 50 dólares el barril, PEMEX no tendría la cantidad de petróleo suficiente para cumplir con la meta presidencial; y si a eso se le agrega el déficit que arrastra la paraestatal, la cosa se pone más fea.
Con los recortes al presupuesto de varios estados para infraestructura y seguridad pública, AMLO, no solo se está viéndose como parcial, vengativo y provocador, llevando a la radicalización –aún mayor-, a varios gobernadores que, entonces sí, llevarían a cabo el Plan separatista, causándole muchos dolores de cabeza. Esta decisión del Presidente, de ser parcial con la mayoría de los gobernadores, crisparía y enfrentaría más a la sociedad. AMLO debe de reconocer que hay regiones en ebullición, que solo esperan una ofensa más para que hagan erupción.
Los pronósticos de los expertos, son muy desalentadores en materia de crecimiento económico en todo el mundo y ven a México, como uno de los países más afectados por la crisis. Esto debería llevar a AMLO a reflexionar sobre las prioridades para evitar una catástrofe económica de grandes magnitudes. Sin embargo, lejos de pensar en detener sus caprichos faraónicos y destinar esos recursos a la recuperación económica, sigue destinando cada vez, más dinero, sabiendo que eso, nos llevará al desfiladero.
No hay mesura en el Presidente. No hay cordura para tomar las cosas en serio. López está viviendo un sueño, no está viendo por el bien de sus gobernados y eso es muy delicado. Si la economía se desempeña como la pintan los especialistas, habrá más desempleo, más pobreza, más violencia y al Presidente, no le alcanzará su fama ni sus niveles de aceptación, cuando la población sienta que está en riesgo.
AMLO ya lleva dos cachetadas en los últimos meses, propinadas por la gente que ya no cree en sus mentiras; que no ve nada claro en su horizonte.
Su famosa rifa, fue un fracaso, amén de haber sido una ocurrencia desafortunada. El pueblo bueno y el resto de la sociedad, no se tragó el cuento de la rifa del avión y López tuvo que apechugar el golpe, que dicho sea de paso, el chiste todavía tiene sus aristas, pues en vez de ganarle, se le tuvo que echar recursos buenos a los malos. Y mientras, el avión, sigue ahí.
La consulta de Morena sobre el enjuiciamiento a los ex presidentes, también mostró que la gente ya está cansada de ocurrencias, de necedades, de engaños; ah, porque la mentada consulta que ahora está solicitando el Presidente, no es más que una nube de humo para mantener entretenida a la gente que se sigue muriendo por el mal manejo de la pandemia. En este último tema, no habrá quien salve al Presidente ni a su corifeo, Hugo López Gatell; la cifra catastrófica de muertes, no solo llegó, sino que se está acrecentando, todo, por el pésimo manejo del Gobierno.
Que recuerde AMLO, que no hay que despertar al tigre, pero éste ya despertó, y está a la vuelta de la esquina.
