POR: EUSEBIO VÁZQUEZ NAVARRO
evnpanorama@hotmail.com
* La educación sigue en línea, asegura el mandatario coahuilense;
* Ya se analizarán los resultados, opinaría la comunidad en general;
* ¿Se buscará la manera de dotar de Internet y herramientas modernas?
* Eso ya se verá pasando la pandemia, nunca o a ver ¿qué onda?
TORREÓN, COAHUILA.-
Hacen ya 51 años estaba preparando mi artículo editorial para semanal de aquel tiempo (1969) y en la escuela primaria rural del ejido San Miguel, municipio de Matamoros, Coahuila, recibí la infausta noticia del fallecimiento inesperado de mi maestro don Teodoro Aguilar Bermea y al calce de ese documento periodístico agregué mi expresión de dolor.
En los días subsecuentes, inicié una campaña al través de las columnas de ese diario convocando a los ex alumnos de la todavía no desaparecida Escuela Normal Rural de Santa Teresa, Coahuila, a una reunión en el auditorio sindical para organizar un acto póstumo en honor de fallecido Maestro. Colocamos una placa marmórea y se llevó a cabo un sentido acto en memoria de nuestro distinguido Maestro, de quien por cierto ya casi nadie se acordó de él con motivo del 51 aniversario luctuoso cumplido apenas este 6 de abril, pero la realidad es que el tema de hoy es otro, porque
Ante la realidad de la pandemia que nos trae de un ala y nos agobia y por la que la educación en las aulas se cambió de presencial a “en línea” (así dicen los que dicen que saben y es posible que así concluya el presente ciclo escolar, pero la verdad es que esto que parece simple merece y necesita una serie de consideraciones, porque entre la mal llamada Reforma Educativa de Peña Nieto y la del actual gobierno, estarán seguros que con la educación en línea ¿Se educará para la vida como es el propósito último y más preciado que dicen tener?.
La verdad es que con la experiencia –poca, mucha o nula- que abrevamos a nuestro paso por las aulas en la educación presencial y escolarizada o curricular, tenemos nuestras dudas respecto a los resultados en un tiempo en que los profesores son tildados de flojos, ganapanes –como decía Santos Valdés- y grillos en potencia que a estas alturas luchan todavía por las “plazas heredadas”, porque para empezar un grandísimo porcentaje de los hogares de la república carecen del servicio de internet y no cuentan con las herramientas de la moderna tecnología para estar conectados, además de que cómo se va a sustituir la presencia del maestro con un artilugio de la moderna tecnología, en el que carece por completo de la emoción del profesor y el alumno.
Los padres de familia por muy de mentalidad moderna no suplirán jamás a los libros de texto y el maestro en línea no podrá sustituir el auxilio del libro o el “dictado de clase” como se dice en las escuelas secundarias, cuando refieren el trabajo presencial de los maestros de educación media básica.
En un sondeo al vuelo –no a mano alzada, como AMLO- entre profesionales de la educación, como afirmaba mi malogrado amigo Juan Odón Fuentes, se sugiere que se le piense un poco o un mucho, antes de echar las campanas al vuelo y se busque de una vez por todas que la educación eduque para la vida de este siglo y en lugar de “robotitos se formen seres de carne, hueso y sobre todo de con sentimientos, con ideales y emociones y con todo lo necesario para sobrevivir a la actual pandemias y a las que vengan… Hasta el próximo PANORAMA…(EVN).-