POR: FERNANDO RANGEL DE LEÓN.
El Presidente de EE.UU., Donald Trump, el 30 de mayo, amagó con cobrar un arancel (impuesto de importación) del 5%, a partir del próximo 10 de junio, a los exportadores de México, de todos los bienes que vendan a su país; si el gobierno Federal, no detiene la migración de los centroamericanos y no ataca el tráfico de drogas, que entran a su territorio; amenazando con subirlo a un 25%.
México es el tercer proveedor más grande del mundo, del vecino país; cuyas exportaciones fueron de 345 mil millones de dólares en 2018; de acero, aluminio, productos manufacturados, automóviles, partes automotrices, aguacate, tomate, cerveza, tequila y otros muchos bienes.
Solo de tomate se exportó a Estados Unidos, en 2018, el equivalente a 2 mil millones de dólares, superando al aguacate pero no al tequila.
Esta medida draconiana de Trump, tiene “más picos que un serrucho”; porque perjudicaría a los exportadores mexicanos; ya que por ejemplo en el tomate trabajan 450 mil empleados; en el aguacate otros tantos cientos de miles; así como en la industria y otras ramas, que suman millones.
Pero también pega a los importadores estadounidenses porque a ellos los exportadores mexicanos les cargarían el 5% del arancel; y quienes a su vez los primeros lo repercutirían al consumidor; que como ya sabemos “aquí y en China”, somos los que “pagamos el pato”; amén de que dejarían de tener los insumos necesarios provenientes de México, para sus actividades industriales y comerciales.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador, ese mismo 30 de mayo, le envió una carta a Trump, dándole razones valederas de historia entre los dos países, de socio economía y de comercio, para que desista de su amenaza; privilegiando el dialogo a la fuerza del derecho; porque la política es eso, entendimiento, conciliación de intereses opuestos, dentro de la diplomacia, en vez de la guerra; para lo que envió al secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard Casaubón, quien ya se encuentra en Washington, D.C., donde el próximo miércoles 5, será recibido por su homólogo norteamericano Mike Pompeo, para ver si se desiste del amago.
En este diferendo con el gobierno de Norteamérica, todos debemos estar unidos con México.