ATRAVESAMOS TRES SEXENIOS LLENOS DE SORPRESAS
Si algo ha caracterizado a Sincensura a lo largo de estos 16 años que hoy cumplimos, en primer lugar, es que muy pocas veces nos equivocamos en nuestros pronósticos -sobre todo políticos. Pudiera hacer un libro con todo lo que anticipamos que iba a suceder contra lo que sucedió, y podrán darse cuenta de la gran cantidad de aciertos.
Hace casi un año -a menos de un mes de las elecciones federales-, pronosticamos que AMLO y su partido, MORENA, arrasarían como un tsunami en las votaciones, incluso, me quedé corto, pues dije que ganaría , con un 40% de los votos, y no de 53.19% como sucedió.
Adelanté que Torreón estaba perdido y que con excepción de Matamoros, San Pedro y Francisco I. Madero, también. Como ven, erré en Matamoros, porque todavía no se había definido la suma del partido Primero Coahuila, del Cacique Contreras Pacheco, a MORENA. Del resto, fuera de Saltillo, que sostuve que ganaría, todos los demás municipios importantes, también morderían el polvo, y así fue.
Y no porque tenga una bola de cristal para ver con anticipación los acontecimientos, simplemente, palpamos el sentir de la gente y analizamos la coyuntura.
Por cierto, sobre el triunfo de Miguel Riquelme a la gubernatura, nunca dudé de que ganaría, incluso, cuando los malos perdedores del PAN, PT, Morena, PRD, Movimiento Ciudadano y toda la morralla que se fue por la libre, formaron el famoso y fallido “Frente por la Dignidad”, que, como siempre lo sostuve, solo era para que los perdedores, Anaya, José Ángel Pérez, Lenin Pérez, Armando Guadiana, Javier Guerrero y demás oportunistas, se lucieran, para después agarrar un hueso. Nunca estuvieron interesados en sacar al PRI de la gubernatura, pues si eso hubieran querido, no hacen sus payasadas de movilizaciones, ni hubieran engañado a decenas de miles de ciudadanos que se unieron al Frente, si se hubieran unido antes de la elección, Riquelme no estaría gobernando. Pero les ganó la soberbia y creyeron que por su cuenta podían ganar, por eso lo del frente, fue un vil engaño para sacar raja personal y lograr ser tomado en cuenta para seguir pegados a la ubre. Y ahí están, José Ángel Pérez, Javier Guerrero, Armando Guadiana, entre otros.
Critiqué que el PRI haya lanzado tan malos candidatos, quien, con excepción de Juan Carlos Ayúp -al que se le atravezó el Cacique Contreras-, los demás candidatos estaban para llorar.
Todo esto está escrito en Sincensura, por si queda alguna duda. Pero bueno, eso ya es historia.
Ahora nos preocupa y nos ocupa, la mentada Cuarta Transformación y su líder Andrés Manuel -a quien, dicho sea de paso, en lo personal le di el beneficio de la duda, pero creo que esta vez, me equivoqué. A AMLO, le di mi apoyo y me sumé a su causa en la elección de 2006, creí que merecía ganar y todavía creo, que le arrebataron el triunfo.
Pero el gran error de López Obrador, fue que no supo asimilar la derrota, y casi perdió la razón, cuando se autoproclamó “Presidente Legítimo” e invadió por meses las calles del Paseo de la Reforma. Ahí cayó de mi gracia y no me volví a acercar en 2012.
Sin embargo, la oportunidad de oro que tuvo el PRI para recuperar y reafirmarse en el poder para no soltarlo nunca más, después del triunfo de Enrique Peña Nieto, como sabemos, y ese fue su pecado, su sexenio terminó en una penosa y escandalosa tragedia, lo cual fue el factor que detonó el fenómeno AMLO.
Y aquí estamos, con un Presidente errático, caprichoso, convenenciero y resentido, que tiene a muchos mexicanos -incluso a miles que votaron por él-, con el Jesús en la boca. Sin un rumbo claro y con el peligro de regresar a las crisis que tanto nos dañaron.
Pero bueno, nosotros por nuestra parte, nos mantenemos firmes en nuestra trinchera, que es Sincensura, como soldados de la pluma, críticos pero objetivos; puntillosos pero tolerantes; implacables contra las injusticias, pero reconociendo a quienes hacen algo por el bien de los ciudadanos y nuestra comunidad.
A todos nuestros lectores, gracias, muchas gracias. Sin ustedes que nos siguen y apoyan siempre, no seríamos nada y hace mucho, hubiéramos desparecido del mapa.
Atentamente:
Raúl Amador Sifuentes DIRECTOR