POR: FERNANDO RANGEL DE LEÓN.
Gracias a su estructura, a su absoluta discreción, a su perfecto control interno de selección de candidatos a puestos de elección popular, y a la ejemplar lealtad y férrea disciplina de sus integrantes, y sobre todo a que ha sido y es gobierno, el PRI acaba de llegar a sus 90 años; siendo el partido más longevo en la historia de México.
Otra de las razones de esa senectud es que los del PRI, no se pelean entre sí en público, sino arreglan con categoría y clase sus diferencias en privado; pues saben que del excremento que le arrojan a otro priista les cae a ellos mismos y a su partido, que es lo que más cuidan porque les da de comer.
Pero parece que algunos regidores de MORENA, en Torreón, ignoran esa lección de la historia; pues en dos meses ocho días, están haciendo todo lo contrario: aflorando su soberbia, peleándose en sesiones de cabildo porque uno acusa a otro de servilismo al PRI.
Pero también algunos aspirantes a candidaturas de MORENA, para los 39 ayuntamientos municipales en el vecino Durango, sobre todo en nuestro querido Gómez Palacio, con su desmedido avorazamiento y total falta de disciplina partidista, están anteponiendo sus intereses personales a los de ese partido.
Olvidan la enseñanza del PRI de que a quien no salía candidato para una elección, lo acomodaban en un puesto de gobierno, y lo hacían candidato para la siguiente elección.
Pero pareciera que los de MORENA, tienen prisa para matar “la gallina de los huevos de oro”; no aprendiendo a los del PRI, que en cerca de un siglo, ellos no lo han matado; sino fue el pueblo el que lo lesionó de muerte el 1 de julio.
Si realmente se está en MORENA, por verdadera convicción, y no por pura conveniencia, debe de apoyársele con entrega, con misticismo, con religiosidad; porque es al pueblo al único que se debe de servir, inclusive con sacrificios de mártir y con paciencia franciscana, como lo demostró AMLO en 18 años, y quien recomienda: “serenos morenos”.